Manuel Valero
@Manu_Valero
El periódico británico The Sun destapaba el pasado sábado que decenas de boxeadores originarios de Europa del Este, en su mayoría de Georgia, habían manipulado su récord profesional, para cerrar combates por toda Europa que les reportaban jugosas bolsas económicas. Estos púgiles suben al ring sólo por motivos económicos, encontrando sus adversarios una menor oposición que en la sesiones de sparring preparatorias. Para cometer esta estafa, los mánagers de estos boxeadores, que perciben cerca de un 50% de sus remuneraciones, se habían abierto una ficha de mánager en BoxRec, pagando alrededor de cuarenta euros por ello, creando posteriormente perfiles de boxeadores inexistentes, que engordaban la trayectoria de sus manejados con victorias ficticias. En las fichas de estos falsos púgiles no aparecía ni la edad, ni una fotografía, ni la estatura, como ocurre habitualmente, sólo un historial plagado de derrotas. Los matchmakers europeos, atraídos por el buen récord de estos boxeadores, contrataban como jornaleros a rivales que realmente sólo habían realizado un par de peleas, además de no haberse sometido los controles médicos pertinentes. Los propios mánagers de los boxeadores de Europa del Este falsearon la documentación, firmando ellos mismo como médicos, que recibían las federaciones locales, tratando de sacar beneficio económico, ya que por un combate a seis asaltos en Georgia, la bolsa no supera los veinte euros. Esta práctica, que ahora ha sido confirmada, era vox populi, siendo las federaciones cómplices de esta estafa. En otros casos, se autorizaban combates profesionales en gimnasios con guantes amateur, en países como Lituania o Bulgaría. A pesar de los resultados adversos en el extranjero, los púgiles de Europa del Este mantenían su prestigio gracias a la aparición de nuevas victorias, que no se habían producido, en su perfil de BoxRec.
Boxrec, portal de referencia a nivel mundial para la consulta de datos relativos al boxeo profesional, cuenta con editores certificados en cada país, encargándose las federaciones locales de enviar las actas para su certificación. «El problema real lo tienen las federaciones, que aceptan esos documentos falsos para realizar los combates. En BoxRec damos por válidos los combates que los federativos nos indican», dice John Sheppard, propietario de la popular página web, certificada por los organismos más importantes del panorama mundial. La alarma entre los promotores europeos se ha encendido, solicitando BoxRec vídeos de los combates señalados como fraudulentos. Aspirantes al título mundial como Dereck Chisora o Martin Murray son algunos de los nombres que han boxeado con rivales con récords manipulados en los últimos años.
ESPAÑA NO SE LIBRÓ DE ESTE FRAUDE
De manera inconsciente, y sin tener culpa alguna de lo ocurrido, varios promotores españoles, que usan BoxRec para buscar oponentes, contaron en sus veladas con púgiles con récords manipulados, que pelearon con el navarro Rubén Díaz o el catalán César Córdoba entre otros.
Además, el Comité de Boxeo Profesional, durante la etapa en la presidencia de Antonio Martín Galán, aceptó documentación falsa, presentada por parte de boxeadores extranjeros, así como remitió a BoxRec actas incompletas, por lo que esas veladas no aparecen a día de hoy en la página estadounidense, con protagonistas como José María Molina.