Daniel Pi
@BastionBoxeo
Este sábado, desde el Forum de Inglewood (Estados Unidos), HBO ofrecerá una velada de enorme calidad que estará encabezada por el campeonato WBC del peso superpluma entre Miguel Berchelt (31-1, 28 KO) y Takashi Miura (31-3-2, 24 KO), enfrentamiento que ya es considerado por muchos uno de los máximos candidatos a pelea del año. De todos modos, los alicientes del evento van más allá de ver una estupenda contienda, puesto que se ha afirmado hasta la saciedad, y prácticamente confirmado extraoficialmente, que el vencedor del encuentro estelar se medirá en una unificación de coronas al ganador del combate de semifondo, protagonizado por el titular WBA del peso superpluma Jezreel Corrales (21-1, 8 KO) y por el aspirante Robinson Castellanos (24-12, 14 KO), por lo que el evento resultará tan decisivo como entretenido y útil para comparar a los dos futuros contendientes por la posesión de una doble corona.
Una batalla a todo o nada
Cualquiera que haya visto combatir en alguna ocasión a Berchelt y a Miura podrá llegar a la conclusión de que el choque en el que ambos pelearán debería tener una intensidad máxima y un desarrollo muy emocionante, cumpliendo con las expectativas de los aficionados que prefieren ver descarnados intercambios de golpes. Aun así, reducir a los dos boxeadores a la categoría de valientes peleadores se queda muy corto y en el caso del mexicano puede llegar a resultar inapropiado. Y es que “El Alacrán” Berchelt, a pesar de su gran agresividad, posee un boxeo muy profundo y completo, una idónea combinación de explosividad y técnica que se traduce en la posibilidad de dominar enteramente los combates de forma táctica, opción que igualmente suele quedar supeditada en su caso a la voluntad de demoler a su contrincante.
Por ello, el campeón, que adquirió su corona WBC del peso superpluma noqueando al temible Francisco Vargas, será considerado el favorito para imponerse, siendo probable que su agilidad, su fulminante gancho de mano adelantada, su velocidad y su fluidez para encadenar manos le sirvan para superar las constantes arremetidas del japonés. De todos modos, el zurdo Miura posee una izquierda recta de brutal potencia y sus combinaciones de ganchos son igualmente formidables, por lo que es capaz de romper una pelea en cualquier momento. Así, siendo ambos boxeadores realmente tenaces y sabiendo lo que es visitar la lona y ser noqueados, el encuentro puede terminar decidiéndose a cara o cruz en cualquier eventual cruce de golpes, cosa que sólo hace que aumentar las expectativas que la pelea genera.
Respecto al paso por la báscula, ambos boxeadores cumplieron dando un idéntico peso de 58,600 kg, por debajo del límite de 59 kg de la categoría del peso superpluma.
El elusivo plan de Corrales
Muy diferente debería de ser el enfrentamiento entre el campeón mundial WBA superpluma Corrales y el aspirante Castellanos, pugna que se presenta como un pleno choque de estilos. En este sentido, el monarca ha realizado un resumen perfecto de lo que puede esperarse del combate al afirmar: “Él vendrá frontal a atacarme. Intentará arrollarme y tratará de lanzar puños para noquearme. Pero por eso me llaman “El Invisible”, no voy a dejar que me atrape”. Ciertamente, Corrales sabe que en su fenomenal juego de piernas reside una de sus principales virtudes y que si consigue mantenerse lo suficientemente dinámico y usa sus largos brazos Castellanos debería pasar muchas complicaciones. Por otra parte, habiendo vencido dos veces a Takashi Uchiyama en sus dos últimas subidas a un ring, el panameño Corrales será favorito con cierta amplitud, estando en cualquier caso este semifondo mucho más decantado que el combate estelar. Pese a ello, no se debe subestimar al mexicano Castellanos, que es un especialista en conseguir triunfos contra pronóstico y como visitante, ejemplo de los cuales fueron su victoria ante Celestino Caballero, su nocaut en cinco asaltos sobre el invicto e insigne prospecto Ronny Ríos, su éxito ante Rocky Juárez y, el pasado mayo, su mayor logro como profesional al batir en siete asaltos a Yuriorkis Gamboa.
Con estos casos citados, Castellanos deja claro que es un púgil que no otorga margen al exceso de confianza de sus rivales y que si se le deja desarrollar su combate y usar sus constantes series de rectos y curvos en la distancia corta y media-corta su peligro aumenta en cada asalto que pasa. Sea como sea, la diferencia de nueve años entre ambos contendientes, favorable a Corrales, y el hecho de que éste esté pasando por su momento de plenitud, parecen factores determinantes para apuntalar sus elevadas posibilidades de éxito.
En cuanto al pesaje, Corrales y Castellanos no tuvieron problemas, dando ambos el mismo peso, 58,700 kg.