Daniel Pi
@BastionBoxeo
Durante los últimos años el peso gallo a nivel mundial ha quedado relegado a una posición muy secundaria respecto a las categorías que inmediatamente le suceden y preceden. Así, aunque Shinsuke Yamanaka se labró un camino hacia algunos rankings de todos los pesos y se pudieron ver algunos buenos duelos titulares, no ha habido punto de comparación con el interés que han provocado los choques protagonizados por púgiles como Carl Frampton, Kiko Martínez, Scott Quigg o Nonito Donaire, entre otros, en el peso supergallo, o los combates disputados en el peso supermosca por púgiles como “Chocolatito”, Inoue, Rungvisai, Estrada, Cuadras y muchos más.
En cualquier caso, parece que la división del peso gallo está iniciando un proceso de renovación y de revitalización que podría desembocar en varios duelos de la máxima importancia y calidad en la categoría a raíz del choque de unificación que este sábado se producirá en el SSE Arena Belfast de Belfast (Reino Unido). En éste se medirán el campeón IBF Ryan Burnett (17-0, 9 KO) (en la foto) y el monarca WBA Zhanat Zhakiyanov (27-1, 18 KO), evidente choque de estilos entre dos muy buenos púgiles representados por compañías británicas que debería dar paso a otros grandes combates contra otros destacados púgiles con promotoras de la misma nacionalidad, como el campeón WBO Zolani Tete, el retador oficial WBA Jamie McDonnell, el aspirante obligatorio IBF Paul Butler, y contra un puñado de púgiles más de la élite sin vínculos con las empresas de Reino Unido pero dispuestos a desplazarse para probar su valía.
La primera etapa de ese plan pasará por un buen combate este sábado que acreciente el interés del público local, cosa que parece garantizada por las cualidades de ambos boxeadores. El kazajo Zhakiyanov es un valiente guerrero con una capacidad para tolerar castigo y atacar sin descanso verdaderamente excelentes, como puso de manifiesto en su coronación ante Rau’shee Warren, que le derribó dos veces en el round inicial pero que no pudo evitar que le hostigara fieramente durante el resto de la contienda. Por su parte, Burnett es un boxeador de buen bagaje amateur y notable técnica, que ejecuta precisos ataques con entradas y salidas y astutos contragolpes y que posee un gran uso del directo aislado o combinado con el hook de mano adelantada. Por ello, parece que, teniendo los dos púgiles métodos opuestos pero siendo apreciablemente combativos, se debería generar una entretenida y emocionante pelea, totalmente a la altura de una unificación a pesar del escaso renombre de ambos.
Por su condición de local, por su superioridad técnica y su mayor versatilidad, Burnett será ligerísimo favorito, estando en su mano ofrecer las variaciones estratégicas que condicionen el desarrollo de la pelea. Y es que será realmente difícil que Zhakiyanov presente otra cosa que una presión intensa y constante, si bien ésta podría llegar a ser insostenible si Burnett no mantiene muy activos sus directos y evita ser un objetivo estático. Por otro lado, el británico verá puestas a prueba tanto su condición física como, lo que es más importante, su paciencia y su tolerancia a la frustración, aspectos que un muy hábil Rau’shee Warren demostró no tener en el combate en que el kazajo Zhakiyanov lo destronó, haciéndole sucumbir en gran parte moralmente. En cualquier caso, si bien Zhakiyanov también es capaz de realizar arremetidas realmente veloces desde la distancia larga, Burnett es un gran contragolpeador ante este tipo de ataques, como evidenció ante el entonces titular Lee Haskins, y sus cualidades defensivas son muy apreciables, por lo que, aunque tiene un riesgo de ser castigado hasta ver reducida su movilidad y, con ello, sus opciones de triunfo, en caso de poder gestionar la presión y alcanzar la lectura de cartulinas será más que probable que se haga con la victoria.
Tanto Burnett como Zhakiyanov marcaron en la báscula un idéntico 53,2 kg, ambos por debajo de los 53,5 kg límite de la división del peso gallo.