Daniel Pi
@BastionBoxeo
Además de un campeonato de Europa del peso supermedio, el enfrentamiento que este sábado se producirá en el Vélodrome de Saint-Quentin-en-Yvelines (Francia) entre el titular continental Hadillah Mohoumadi (22-4-1, 16 KO) y el aspirante, excampeón de Europa, Christopher Rebrasse (25-5-3, 6 KO) es una pelea estupendamente emparejada y que debería ofrecer buenos rounds de boxeo. Tanto es así que, sin ser ninguno de los dos parte de la élite de la división, su nivel es tan elevado y notables sus cualidades y su dureza que el encuentro podría resultar superior a algunos de los enfrentamientos ofrecidos en el torneo World Boxing Super Series y a esos campeonatos mundiales tan habituales en los que el favorito es impensable que caiga derrotado.
Por otro lado, no hay que pasar por alto las consecuencias de esta pugna, ya que hay que recordar que Mohoumadi es 11º WBC y Rebrasse 15º en ese mismo ranking, de modo que, siendo ambos rivales directos en la clasificación mundial, quien se haga con la victoria debería ver decisivamente mejorado su posicionamiento y, con ello, quedar situado cerca de una eliminatoria o recibir una gran oferta para combatir contra uno de los máximos aspirantes a nivel mundial. Asimismo, no se debe pasar por alto la posibilidad de que pueda afrontar una defensa EBU en Rusia ante el aspirante obligatorio Stanislav Kashtanov que podría dejar una lucrativa bolsa.
Regresando al encuentro de este sábado, el campeón Mohoumadi es quien será considerado favorito, y no sólo por la posesión de la corona EBU. Y es que, dejando de lado su tropiezo en un sólo asalto ante un Callum Smith valorado como uno de los mejores boxeadores de la actualidad en la división y ante el que cometió un claro error táctico, Mohoumadi ha logrado ocho victorias en nueve peleas, destacando las logradas como visitante ante Pawel Glazewski y ante Mariano Hilario. Además, estos logros fueron precedidos por una derrota ante James DeGale en la que ofreció mucha resistencia.
Aun así, no se debe infravalorar ni mucho menos a un Rebrasse que nunca ha sido derrotado antes del límite, que también fue campeón nacional francés y europeo (derrotando en cuatro asaltos a Mohammed Ali Ndiaye) y que tiene experiencia ante la élite británica y mundial, algo ejemplificado en sus durísimos e igualados enfrentamientos contra George Groves y Callum Smith, ante el que ofreció una imagen diametralmente opuesta a la de Mohoumadi. Junto a estas dos visitas a las Islas Británicas, además, el pasado año se midió al top 10, y protegido de Matchroom Boxing, Rocky Fielding, que se impuso con una controvertida victoria dividida en la que muchos vieron el triunfo de Rebrasse. Así, aunque su récord dice tres triunfos y tres derrotas en sus últimos seis combates, esto no debe llevar a equívocos ni confundir sobre su grado de competitividad.
Por otra parte, los estilos de ambos parecen encajar muy bien, contrastando el frontal empuje de Mohoumadi, con gran pegada y enorme peligro con sus combinaciones de curvos, con la ortodoxia y la frialdad de un Rebrasse que posee mejor defensa y una fantástica destreza con las series de directos, de modo que los puntos fuertes de uno y otro parecen ser idóneos para aprovechar las brechas del boxeo de su adversario. Dado que Rebrasse no cuenta con la suficiente movilidad como para evitar estar bajo las andanadas de su oponente de forma continuada, y como Mohoumadi suele optar por unos arranques muy intensos, quizás la primera mitad sea la más compleja para el retador, aunque es muy resistente y fuerte y lo suficientemente hábil y tenaz en los intercambios en corta como para plantar cara. Así, puede que la pugna termine encontrado su resolución en una decisiva segunda mitad, en la cual resultarán claves la capacidad de Mohoumadi para aguantar contraofensivas cuando padezca desgaste por su arrojado afán ofensivo inicial y la cantidad de merma física que con su pegada haya podido lograr ante un adversario inamovible en su encaje pero que subirá al ring con una desventaja tan grande como contar con una única pelea en 19 meses.