Daniel Pi
@BastionBoxeo
Alejándose ligeramente de la etiqueta de campeón modélico que tanto tiempo había llevado sin el menor atisbo de crítica a sus intachables declaraciones, el venezolano Jorge Linares (43-3, 27 KO) parece que está emprendiendo un camino más propenso a las afirmaciones osadas y controvertidas a la vez que se acerca a las mayores peleas de su carrera, las que tienen en juego no sólo el top 10 de todos los pesos sino también su posición en la historia del boxeo.
Así, tras su ajustada victoria dividida ante el oro olímpico Luke Campbell, en lugar de alabar las cualidades del oponente que le dejó a un paso de perder su corona, Linares señaló que le sorprendió que su rival durase más de cinco asaltos. No contento con ello, Linares pasó a desacreditar a su antiguo entrenador, el afamado Freddie Roach. Por último, ha estado menospreciando a su próximo rival, el filipino Mercito Gesta (31-1-2, 17 KO), pupilo de Roach, al centrarse una vez tras otra en cada una de sus entrevistas en sus perspectivas de futuro y en sus posibles enfrentamientos ante Lomachenko o Mikey García, pasando casi totalmente por alto su inmediato reto.
Lógicamente, siendo objetivos, este sábado en el Forum de Inglewood (Estados Unidos), Linares será abrumador favorito para retener su cetro por tercera ocasión, pagándose unos céntimos por su triunfo y de doce euros en adelante por el del retador. En cualquier caso, la peor actitud para encarar una pelea mundialista es situar las miras constantemente más allá del choque que ahora mismo tiene en frente, más aún si el aspirante es un púgil sin casi nada que perder pero muchísimo que ganar, zurdo y con un boxeo algo heterodoxo.
A pesar de ello, la velocidad, precisión y técnica del “Niño de Oro” son muy superiores y con ellas debería bastarle para neutralizar a Gesta que, además de contar con un ritmo combativo demasiado fluctuante, es sumamente irregular en su precisión y poco constante en tareas defensivas, llegando a esta pugna con una racha de un empate y tres victorias ante adversarios de nivel medio o medio-alto y habiendo padecido dos knockdowns. Quizás, como es un boxeador bastante fuerte y tiene las de perder desde un punto de vista táctico, con elevada agresividad Gesta podría tener una de sus mejores opciones de ofrecer, al menos, una pelea algo disputada. Pese a ello, el filipino dice que optará por realizar una contenida y medida presión, algo que, recordando lo desidioso que puede llegar a ser su boxeo, debería ponerle las cosas sencillas a Linares para poder dominarlo con sus deslizamientos sobre el cuadrilátero y su fenomenal uno-dos-hook, teniendo que preocuparse en ese caso sólo por el tenso jab de Gesta y sus esporádicos golpes de poder en trayectorias poco convencionales.
En cuanto al paso por la romana, Linares marcó el límite exacto de la división, 61,200 kg, mientras Gesta dio 61 kg.