Daniel Pi
@BastionBoxeo
“Es potencialmente la última vez que veréis a estos hombres sobre el ring”, afirmó el promotor Eddie Hearn, dejando clara la trascendencia que tiene el duelo de revancha que disputarán en el O2 Arena de Londres (Reino Unido) este sábado Tony Bellew (29-2-1, 19 KO) y David Haye (28-3, 26 KO). Y es que ambos boxeadores han señalado como probable que puedan apuntar al retiro a continuación, por lo que, existiendo una animadversión entre ambos, estando en juego parte de su legado y queriendo disipar las dudas del primer enfrentamiento, los dos entrarán al ring dispuestos a destruir a su oponente.
De todos modos, un eventual resultado desfavorable resultaría mucho más perjudicial para Haye que para Bellew, habiéndose cambiado las tornas en cuanto a la valoración que reciben ambos con el paso de los años.
Respecto a “The Bomber” Bellew, muchos aficionados, incluso británicos, nunca esperaron nada de él, negativas perspectivas que se vieron respaldadas por las derrotas ante Adonis Stevenson y Nathan Cleverly y por sus controvertidos resultados en el primer cruce ante Isaac Chilemba y en su duelo ante Mateusz Masternak. Con todo, y aunque fue muy cuestionable el modo en el que el WBC le otorgó la tercera oportunidad mundialista de su carrera, Bellew supo estar a la altura del gran reto que tenía delante noqueando al peligrosísimo Ilunga Makabu (que le había derribado en el primer asalto) en la mayor pelea de su carrera, la que disputó en el estadio del equipo de fútbol del que es seguidor, el Everton. Así, convertido en un ídolo local en Liverpool, habiendo sido actor en un spin-off de la saga Rocky (la película Creed) y finalmente venciendo contra pronóstico a David Haye en el primer cruce, Bellew llegó más alto de lo que sus fans podían soñar, siendo actualmente bastante respetado en el boxeo de su país.
Por su parte, Haye es actualmente muy denostado y no cuenta con un apoyo local tan sólido como el de su rival, siendo comparado recurrentemente con Amir Khan al decirse que tenía todas las cualidades físicas y técnicas para triunfar pero no cumplió más que un ápice de las expectativas. No obstante, las mayores críticas no le vienen a “Hayemaker” por lo que podría haber conseguido y no logró sino porque se sospecha, e incluso se le grita a la cara, que lleva dopándose muchos años, si bien nunca ha sido probado.
Muchos no entienden cómo, después de largos periodos de inactividad entrelazados con graves lesiones y postoperatorios impeditivos, Haye ha entrado al ring presentando un físico portentoso y ganando ocho kilos de puro músculo. Por otro lado, como un efecto del dopaje continuado puede ser la multiplicidad de lesiones, dado que se potencian los músculos más allá de los que ellos mismos y los tendones pueden soportar, Haye, que ha padecido lesiones graves en todas sus extremidades y en la mayoría de sus articulaciones, habiendo permanecido tres años y medio fuera de los rings y habiendo recibido el consejo médico de que se retirase, es visto todavía con mayor suspicacia.
Finalmente, que decidiese rechazar incluirse en el programa antidopaje del WBC, siendo por ello retirado del ranking cuando estaba situado en el top 3 de la lista del peso pesado de dicho organismo, ha sido para muchos la confirmación de que tiene algo que ocultar. Entre ellos el mismo Tony Bellew, que es uno de los boxeadores que más firme se ha mostrado contra el consumo de sustancias prohibidas y que no dudó en acusarle de dopaje en la conferencia de prensa de su primer combate, aunque las acusaciones más duras han llegado a través de los infinitos comentarios dejados por los aficionados en las redes sociales de Haye.
Es por todo esto que el enfrentamiento es tan importante para Haye, puesto que una derrota podría lanzarle al retiro con su prestigio deportivo destrozado y manchado para siempre por las sospechas de dopaje, mientras que una victoria le daría cierto crédito y le podría llegar a permitir apuntar a un gran enfrentamiento en el peso pesado, al que, eso sí, tendría que acercarse bajo un estricto régimen de controles para sacudirse parte de las sospechas.
Teniendo en cuenta cómo se desarrolló el primer choque entre Bellew y Haye hasta que el segundo padeció una lesión en el tendón de Aquiles en el sexto asalto que le arrebató la posibilidad de la victoria, el favorito en las casas de apuestas es nuevamente David Haye. Como es más rápido, más potente, más preciso y mejor técnicamente, se espera que Haye pueda lograr grandes resultados escogiendo sus ataques con explosivas entradas y salidas ante un Bellew que siempre es peligroso al contragolpe.
Sin embargo, muchos dudan de si el físico de Haye, que pareció lento en la sesión de entrenamiento público, resistirá sin que una lesión haga evidente la necesidad de que se retire, más aún afectado por catorce meses fuera de los rings. Ante esta posibilidad, Haye afirma que tratará de castigar con mucha severidad a su contrincante en los primeros seis rounds, evitando que una pelea larga pueda volver a truncar sus opciones de triunfo, aunque si esto va acompañado de una desmedida toma de riesgo se podría abrir la puerta para que Bellew, que dice estar en el último año de su carrera, dé una nueva sorpresa y se retire en el punto culminante de su trayectoria.
Bellew paró la romana en 95,400 kg y Haye en 99,900 kg, cifras algo más ligeras que las del combate precedente entre ambos (96,800 kg y 101,800 kg).