Odín Bernades
@Odin_8onzas

Pocos sitios gozan del ambiente que se respira en el York Hall, el clima y pasión por el boxeo que ahí se percibe es único e inigualable. Gran cantidad de mitos del boxeo británico lo visitaron en algún momento de su carrera, siendo testigo de cientos de veladas, de miles de combates y batallas inolvidables.

Un lugar pequeño a la par que caliente, donde la esencia futbolera inglesa invade todo el recinto convirtiéndose en una olla a presión. Una diminuta Bombonera del boxeo. Considerado como uno de los lugares más emblemáticos en Europa y en todo el mundo, el “hogar espiritual” del pugilismo británico. El templo al que hoy le dedicamos estas líneas es el mítico York Hall.

Este edificio gregoriano, considerado de grado II (edificios particularmente importantes o de especial interés en Inglaterra o Gales), fue Inaugurado en 1929 por los mismos condes de York y está ubicado en el corazón de Bethnal Green, en la zona del East End de Londres de donde han salido ilustres de la historia del boxeo británico, como Daniel Mendoza “El Judío”, campeón inglés del peso pesado de finales del siglo XVIII, que vivió allí durante más de tres décadas, o Joe Anderson, boxeador de finales de siglo XIX, campeón del conocido torneo llamado “All England”, en el que el ganador se llevaba un bonito cinturón de plata. Ellos fueron los pioneros y una inspiración para instaurar una fuerte cultura pugilística en la zona.

El York Hall fue diseñado originalmente como un recinto de ocio con baños turcos, baños rusos, saunas o piscinas, pero su gran cantidad de salas facilitó poder ofrecer otros servicios o actividades como reuniones, banquetes, bodas, desfiles de moda o fiestas varias. La sala principal del York Hall donde se disputan los combates de boxeo es pequeña, tiene un escenario donde lo aprovechan como entrada para los boxeadores y goza de unas humildes gradas superiores muy cercanas al ring; eso lo hace especial.

Las apenas 1200 personas que caben en el recinto son suficientes para hacer retumbar los cimientos del York Hall con sus cánticos varios, gritos de ánimo y jadeos. La pura pasión que tienen los ingleses por el boxeo hace el resto. La combinación perfecta para que el York Hall se convirtiera en un sitio de culto para el mundo del boxeo británico y, aún hoy en día, conserva esa condición. El aura que ahí se genera es indescriptible y sólo los que han tenido la suerte de presenciarlo pueden explicarlo.

Después de dos décadas en funcionamiento, la piscina principal cayó en desuso, y este fue el motivo por el que el York Hall albergaría su primer evento de boxeo en marzo de 1949. Fue una velada amateur, concretamente unos campeonatos regionales de la ABA (Asociación de Boxeo Amateur). A partir de ese momento el noble arte no dejaría de practicarse y seguiría así todos los años, en su mayoría campeonatos regionales del Norte de Londres, campeonatos nacionales (Inglaterra), algunos campeonatos británicos y también algunos torneos de las World Boxing Series, entre otras veladas de perfil más bajo.

En 2003, el recinto estuvo a punto de echar el cierre, ya que económicamente era complicado de sostenerse. Gracias a algunas asociaciones del barrio, se movilizó a los ciudadanos, hubo manifestaciones en contra de su cierre y se formaron equipos de trabajo para encontrar la solución. Finalmente firmaron un contrato con una conocida compañía que gestiona centros deportivos y salvaron al mítico recinto de la quiebra, reformándolo de arriba abajo y haciéndole reflotar para alivio de los aficionados. Por cosas como esta se considera un sitio de culto para el boxeo británico, sobre todo en el este de Londres.

El York Hall y su historia amateur
Una inmensa cantidad de boxeadores amateur debutaron o pelearon en el York Hall, muchos de ellos posteriormente consiguieron competir a un gran nivel o ganar títulos importantes, algunos han sido o son hoy en día, estrellas de este deporte.
En 1950, en el segundo evento celebrado en el York Hall, debuta con victoria un joven del condado de Essex llamado Ron Hinson. Tuvo una corta pero gran carrera amateur, coronándose campeón británico del peso ligero en 1951. Su máximo éxito como profesional fue un campeonato regional.

El londinense Derek Lloyd debutó con derrota el 1954. Su carrera amateur fue bastante irregular, algo mejor le fue en el ámbito profesional, llegando a disputar el campeonato de Europa del peso mosca en 1961. Lloyd cayó derrotado contra una leyenda del boxeo italiano como Salvatore Burruni.


Un gran púgil amateur que también pasó por el mítico recinto más de una vez fue el también londinense Nicky Gargano. Fue campeón de los Juegos de la Commonwealth, campeón británico y participó en los Juegos Olímpicos de Melbourne 1956 en el peso wélter, cayendo en semifinales contra el futuro campeón, el rumano Nicolae Linca.

Otro que debutó con derrota en el York Hall fue el wélter de West Ham Ralph Charles. Su suerte cambió y consiguió ser subcampeón británico amateur. Ya en profesional fue varias veces campeón británico y de la Commonwealth, campeón de Europa y llegó a disputar el mundial unificado de la Asociación y el Consejo en 1972 contra otra leyenda: el cubano José “Mantequilla” Nápoles, perdiendo por KO en el séptimo asalto.

Otros tantos púgiles empezaron su andadura amateur en el famoso recinto y fueron campeones británicos: Billy Walker, Mickey Carter, Al White, Sugar Bill Robinson, Johnny Cheshire o John H. Stracey. Este último es el que tuvo la mejor carrera profesional, llegando a ser campeón británico, europeo y tres veces campeón del Mundo del Consejo Mundial de Boxeo. Todo ello en el peso wélter.

El York Hall también vio dar sus primeros pasos como amateur al grandísimo púgil Maurice Hope, que también lo consiguió todo como profesional: campeón británico, europeo y cinco veces campeón del Mundo superwélter del Consejo.

Las grandes veladas amateur no llegarían hasta principios de los 2000, con varios campeonatos ingleses o británicos. Nombres como Luke Campbell, Khalid Yafai o Frankie Gavin, se coronaron campeones ingleses amateur a finales de 2006, Callum Smith haría lo mismo en categoría júnior el siguiente año y en 2008 repetiría éxito Luke Campbell; en la misma velada también ganaron sus finales por el título británico Liam Smith o un tal Tyson Fury.

En 2009 se celebró un atractivo torneo amateur Inglaterra vs. Estados Unidos, en el que se pudo disfrutar de púgiles como Savannah Marshall, Natasha Jonas, Paul Butler o Leigh Wood por el lado inglés y de jóvenes talentos en el equipo estadounidense, como Michael Ruiz Jr, Lenroy Thompson o Errol Spence Jr.

Al año siguiente en los campeonatos ingleses, una buena lista de futuras estrellas salieron campeones como Paul Butler, Tommy Stubs, Anthony Fowler, Danny Price, Joe Hughes, Martin J. Ward y Anthony Joshua. Para recordar también, los campeonatos británicos amateur celebrados el año 2011: Savannah Marshall, Joe Joyce, Anthony Fowler o Callum Smith entre otros, fueron los vencedores.

El último gran evento amateur celebrado en el York Hall fueron unos torneos de las World Boxing Series. En realidad, técnicamente no fue amateur, ya que en las WBS sí que participan púgiles amateur, pero se disputan combates profesionales y permite a los boxeadores mantener el estatus de amateur, mientras empiezan a entrar en el mundo del boxeo profesional. Dicho evento fue un Gran Bretaña vs. Ucrania y se celebró el año 2013, dejando grandes combates con protagonistas que hoy en día algunos son estrellas mundiales: Oleksandr Usyk derrotó a Joe Joyce, Vasyl Lomachenko consiguió la victoria frente a Sam Maxwell, Joseph Ward venció a Denys Solonenko y Andrew Selby se impuso frente a Ivan Ilnytskyy.

Se seguirían celebrando varios torneos de las WBS con algún que otro púgil importante, como Joshua Buatsi, Anthony Fowler, Lawrence Okolie, Joe Cordina, Josh Kelly, o Alen Babic. Desde 2018 no se celebra ninguna velada amateur y de momento no parece que se vayan a celebrar más; una lástima, ya que por ahí han debutado o pasado una amplísima cantidad de figuras del boxeo británico y mundial y todos ellos han contribuido a construir una grandiosa historia de boxeo amateur con el histórico York Hall como escenario principal y seguro que los amantes del boxeo en el East End de Londres estarían encantados de volver a presenciar boxeo amateur y poder volver a disfrutar de las futuras estrellas del boxeo.

Aunque esto no queda aquí, ya que aún nos queda la segunda parte. Queda descubrir toda su historia en clave boxeo profesional: Sus primeros eventos pro, sus veladas más importantes, los debutantes que triunfaron más adelante, púgiles que también pasaron por allí y que hoy son estrellas… y mucho más. Pero esto, será en unos días. Y os aseguro que dará para mucho.