José Manuel Moreno
@josemorenoco
Julio César Chávez Carrasco (48-1-1, 32KO) esta vez no dio pie a la polémica ni a descontentos, y ganó con solvencia y claridad en combate de revancha al estadounidense Bryan Vera (23-8, 14KO) en combate de fondo celebrado en el Alamodome de San Antonio, Texas (EEUU). Las cartulinas fueron de 114-113, 117-110 y 117-110 para el «Hijo de la Leyenda», que conectó 256 golpes por 205 del norteamericano. No obstante, Vera tuvo sus momentos como en el segundo asalto, con una poderosa derecha que sintió Chávez.
El árbitro puertorriqueño Rafael Ramos descontó un punto en el octavo asalto a Vera por un empujón. Chávez boxeó realmente bien, se sintió a gusto y en el último round se permitió el lujo de contemporizar, sabedor de su victoria. Para él, la clave estuvo «en pensar en la pelea y no en el peso» y ahora, con la euforia clásica de estos casos, se pide para sí a los mejores pesos medios del mundo, empezando por «Maravilla» Martínez y terminando por «GGG» Golovkin. En una carrera como la suya llena de altibajos, habrá que esperar acontecimientos, que Vera tampoco es Marvin Hagler.
