Julio González
Según nuestro criterio, estos son los cinco pesos semipesados más destacados de la historia del boxeo español.
Gabriel Campillo
El mejor semipesado de nuestra historia y único campeón mundial nació en Madrid el 19 de diciembre de 1978. Fue el primer campeón del mundo español que era zurdo. El espigado zocato poseía una gran técnica y según algunos poca pegada, pero consiguió triunfos importantes gracias a su potencia. Debutó como profesional el 4 de octubre de 2002 en el Pabellón Polideportivo de San José de Guadalajara para vencer a Arturas Margis por abandono en tres asaltos.
Campillo es seguramente el púgil español con mayor número de injusticias en sus combates internacionales, al ser privado del campeonato de Europa del peso supermedio en Alemania ante Karo Murad y también del título mundial injustamente en Las Vegas primero ante Beibut Shumenov, y más tarde ante Tavoris Cloud, en una pelea que fue calificada por la prensa americana como el robo del año.
Su gran noche llegó el el 23 de junio del año 2009 en el Gimnasio Hogar de los Tigres, de la ciudad de Sunchales, en la norteña provincia argentina de Santa Fe. La pelea se desarrolló desde un principio con el argentino Hugo Hernán Garay buscando una victoria antes del límite. Campillo acudió como víctima propiciatoria para que el campeón revalidara el título. El local llevó a las cuerdas en los primeros asaltos al aspirante, pero sin que este pasara momentos de apuros. El español estaba muy bien preparado y aguantó los primeros asaltos sin problemas. A partir del sexto, el español tomó el centro del ring y dominó el combate. De esta forma se convertía en el décimo boxeador español que ganaba un título mundial.
Perdió injustamente el cinturón mundial en el Hard Rock Hotel Casino de Las Vegas ante Beibut Shumenov. La decisión dividida de los jueces así lo dictó. Sólo el juez Levi Martínez reflejó lo que sucedió en el ring, al puntuar 117-111 para Campillo.
Para su desgracia volvió a disputar el mundial en Estados Unidos. El 14 de febrero de 2012, el estadounidense Tavoris Cloud retuvo el título mundial del peso semipesado de la IBF, mientras el speaker anunciaba el resultado entre los abucheos del público al término del combate. El veredicto en decisión dividida daba vencer por puntos a Cloud sobre el español. Campillo volvió a ser perjudicado por la decisión de los jueces, habiendo hecho méritos para ganar la corona.
Después de once años como profesional, en los que combatió siempre con los mejores púgiles mundiales sin rehuir a nadie, prometió que cuando no pudiera estar a la altura de los referentes de la división dejaría el boxeo. En febrero de 2016 anunció su retirada el boxeo profesional para montar un gimnasio en Madrid.
José Martínez Valero, «Martínez de Alfara»
Hasta la fecha el único campeón de Europa de nuestra historia. Nació en Valencia, el 14 de octubre de 1911. Se aficionó al boxeo después de ver varios combates en la Plaza de Toros de Valencia, donde trabajaba vendiendo gaseosas los días de corridas y veladas de boxeo. Se inició practicándolo en el pueblo de Alfara del Patriarca, donde vivía desde pequeño. Su madre, María Valero, era guardabarreras de la línea Moncada y Alfara del Patriarca. Vivían en una casa de los empleados del tren y gracias a los hermanos Beltrán, Tomás y José María, que vieron la gran capacidad del púgil para la práctica del boxeo, se decidió a combatir. Delante de la estación de tren, en un almacén colgaron un saco que compraron para comenzar a prepararlo. Al poco tiempo los hermanos Beltrán lo inscribieron en el Cinturón de Valencia, torneo amateur que acabó ganando.
Consiguió el campeonato de Europa después de vencer al belga Leonard Steyaert, El combate se celebró en el Olimpia de Barcelona, organizado por el “Sindicat de Periodis Esportiu”. Martínez de Alfara conquistó el título europeo al derrotar por puntos a Steyaert, en un combate muy duro. Arbitró el francés Mr. Vaisberg, quien también actuó como juez único. Esta era la tercera vez que Martínez de Alfara disputaba el cetro continental.
El título le duró muy poco tiempo. El 27 de marzo de 1934 en París, Martínez de Alfara perdió el título al ser descalificado en el decimotercer asalto por el árbitro italiano Simonetti de forma injusta y descarada, alegando un boxeo irregular ante el campeón mundial del peso medio Marcel Thil. El público que llenaba el recinto parisino protestó ruidosamente la decisión del árbitro. La Guerra Civil le llevó a Sudamérica donde combatió y donde moriría años después.
Francisco Bueno
Uno de los más populares y queridos púgiles de la posguerra española. Nació en Rentería (Guipúzcoa) el 16 de septiembre de 1916. Paco Bueno fue uno de los mejores púgiles que ha tenido el boxeo español en la década de los años cuarenta. Se aficionó al boxeo al presenciar una velada con un amigo. Con diecisiete años se coronó campeón nacional amateur en el peso medio en 1933. En 1935 conquista el título amateur en el peso semipesado, y durante esos años representó a la Selección Nacional en varios encuentros. La Guerra Civil cortó su prometedora carrera y su presencia en la Olimpiada de Berlín, a la que no pudo acudir debido al conflicto bélico en España.
Después de la guerra debutó como profesional y venció a Luis Torrado por KO en un solo asalto. Con muy pocos combates, se adueñó del título nacional del peso semipesado el 4 de febrero de 1941 en Bilbao al derrotar por KO en cuatro asaltos a José Irastorza. Durante cuatro años fue el campeón indiscutible del semipesado, y defendió el título en seis ocasiones contra los mejores boxeadores nacionales. Sus rivales fueron Luis Alcalá, Gabriel Zubiaga (dos ocasiones), Ignacio Ara, al que venció por puntos el 18 de abril de 1944, y Abelardo Acosta. Cedió el cetro en la noche del 1 de agosto de 1945 en la Plaza de Toros de Las Ventas de Madrid ante su paisano de Sopelana, Fidel Arciniega.
En dos ocasiones disputó el título europeo del peso semipesado, la primera al inglés Freddie Mills. Pocas opciones tuvo el vasco, que perdió por KO en dos asaltos. Años después volvería a pelear por el título semipesado, en esta ocasión contra el francés Albert Yvel, perdiendo también antes del límite, por lesión en el 8º asalto, en la que a la postre fue su última pelea como profesional.
Mateo De La Osa
Nacido en el barrio Saturrarán de Motrico (Guipuzcoa) el 5 de noviembre de 1905.
En 1926 se incorporó al servicio militar y allí conoció a Isidoro Gaztañaga, que es quien le enseñó sus primeros conocimientos. Al término de la mili se marchó a San Sebastián con el boxeador José Martínez “Jim El Zaid”, al que también conoció durante su prestación militar. Debutó como amateur el 22 de octubre de 1927 en el Frontón Urumea de San Sebastián, contra un amateur argentino llamado Johnston Rodríguez, al que venció por KO en el primer asalto.
El 16 de agosto de 1927 en la Plaza de Toros de Tafalla debutó como profesional contra José Navalls, al que venció por KO. Después de una serie de triunfos, diez victorias, en la mayoría antes del límite, y una sola derrota contra Isidoro Gaztañaga por KO, en agosto de 1928 disputó la revancha contra Gaztañaga en el Frontón Jai-Alai, en la que venció De la Osa por KO en dos asaltos. De la Osa se paseó por todo San Sebastián presumiendo de haber vencido a un hombre con más peso y envergadura.
Otro combate importante lo disputó en 10 de noviembre de 1928 en el Frontón Euskalduna de Bilbao. De La Osa se mostró muy superior a Gabiola sometiéndolo a un gran castigo en los seis asaltos que duró el combate, adjudicándose el título nacional y 4.500 pesetas, todo un récord de bolsa para aquella época. Pocos meses después renunció al título en la Federación Española de Boxeo con la intención de marchar a América.
Debutó en Nueva York en 1928, y en 1929 consiguió cinco victorias consecutivas por nocaut, después de una temporada regresó a España y en 1931 volvió a Estados Unidos.
En 1933 disputó su último combate, en junio en Barcelona contra Arturo Godoy, con el que perdería. El boxeador chileno disputaría el mundial a Joe Louis.
Avenamar Peralta
Nació en San Juan (Argentina), el 30 de enero de 1943. Es el tercero de una gran familia de boxeadores, sus hermanos Néstor y Goyo Peralta fueron los que comenzaron con la saga, aunque luego vendría otro más. Goyo fue famoso en España y quien se trajo a Avenamar a continuar su carrera en nuestro país. También fue quien le enseñó el arte del pugilato, y le llevaba la bolsa al gimnasio acompañándole.
Debutó en Buenos Aires el 9 de enero de 1970 ante Ángel Coria, al que derrotó por puntos. A finales de ese año se coronó campeón argentino ante el que luego sería campeón mundial Víctor Galíndez, con el que se enfrentó en varias ocasiones durante su carrera. Además ganó a Juan Aguilar, Jorge Ahumada, Eddie Jones, y otros boxeadores de primer orden. Avenamar se estableció en nuestro país a principios de 1978, aunque en años anteriores había combatido por toda Europa y se afincó en Alemania, de la mano del mánager alemán Frizs Wiene.
Su debut en España fue el 12 de enero de 1974 en Madrid enfrentándose a Billy Suzi al que venció por puntos. En septiembre de 1977 le es concedida la nacionalidad española y después de superar unos pequeños problemas, Avenamar, que había sido sancionado a perpetuidad a no pelear en España por un incidente que tuvo lugar en Austria cuando José Durán se enfrentó a Franz Csandl, después fue perdonado.
A los pocos meses se le concedió la oportunidad de disputar el título europeo como aspirante oficial. Avenamar Peralta hizo combate nulo en disputa del título continental semipesado ante el italiano Aldo Traversaro. El resultado fue vergonzoso pues Avenamar había merecido el triunfo. Nunca fue reparada la injusticia y no volvió a tener otra oportunidad de disputar el título.
Disputó el nacional del peso pesado al gallego Felipe Rodríguez, perdiendo por puntos en un meritorio combate en Pontevedra. Dos meses después disputó el título nacional de su peso semipesado el cual ganó al derrotar al portugués nacionalizado Alejandro Cardoso.
La Federación había nombrado a dos extranjeros nacionalizados para cubrir la corona vacante. El título se disputó el 8 de agosto de 1980 en el Palacio de los Deportes de Madrid con victoria a los puntos de Avenamar Peralta. El título nacional lo perdió ante el salmantino Emilio García, en agosto de 1981 en la Plaza de Toros de Melilla. Fue su último combate profesional.