Queto Calvo
(@unpaseoentrelascuerdas_oficial)
El pasado viernes tenía lugar en el Pabellón Margarita Ramos de León la anunciada gala solidaria en favor de Saúl Tejada, lesionado el ya lejano 17 de octubre de 2016 cuando defendía su condición de campeón nacional del peso gallo.
Amigos, familiares y buena parte de la entendida afición local respondieron a la llamada hasta completar una entrada en torno a las 500 personas: los seis combates amateur y el cariño de la gente hacia su boxeador dieron ambiente y colorido al recinto pese a la fría y lluviosa tarde en la ciudad.
Abrían la noche Los Taberneros, que animaron al personal con sus rumbas y su buen rollo hasta el primer duelo entre Álvaro Rodríguez (Morebravo) y Alejandro Sánchez (Cantón), con victoria del primero. A continuación Zacarías (Pueblo Boxing) superaba a Alejandro Cerna (Palencia) y Hugo Callejo (Morebravo) se imponía a Abdel (Diego Uceta). Tras un breve descanso, amenizado por @danimartiny, Laura González (Morebravo) sacaba adelante su difícil combate frente a Karen Carballo (Matilla).
Se caldeó el ambiente con la esperada pelea entre Héctor León Chimba (Morebravo) -ojo a este chaval- y Sergio Fernández (Mamba Gym, Ponferrada), que no decepcionaron y ofrecieron un recital de buen boxeo. La victoria del leonés daba paso al Joseba (Pueblo Boxing) contra Alfonso Núñez (Cantón), triunfo del local y pleno para los de casa.
Al final Kike Soria y Héctor Moreira, artífices del evento, hicieron entrega a un emocionado Isidro Tejada -padre de Saúl- de un talón por valor de 4.425 euros, producto de la recaudación obtenida en taquilla, una ayuda más que necesaria para la familia del bravo púgil leonés, que mejora poco a poco en su lucha diaria.
Gracias a los que asistieron, a los que no pudieron desplazarse pero contribuyeron desde la distancia y a los competidores, preparadores, árbitros, jueces, sanitarios y resto de personal. Y especialmente a la gente del Team Moreira por el curro para llevar a buen puerto una inmejorable causa: la del apoyo a un compañero.
Va por ti, Saúl.