Daniel Pi
@BastionBoxeo
Las expectativas eran altas, al igual que las esperanzas, pero todo ello se vio inesperadamente aplastado por un gran comienzo del visitante, culminado, eso sí, con una actuación errada del árbitro finlandés Anssi Perajoki. Y es que, en el combate estelar del evento organizado en el Bilbao Arena en la noche del sábado, David Avanesyan (25-3-1, 13 KO) retuvo su corona de Europa del peso wélter con un KOT en el primer asalto, cayendo dos veces a la lona Kerman Lejarraga (28-2, 23 KO) antes de que el árbitro realizase una cuestionable detención.
Tras tantearse durante algo más de un minuto, Lejarraga se vio sorprendido por un croché de mano adelantada, siendo posteriormente hostigado por directos y crochés hasta que nuevos curvos diestros lo arrojaron a la lona. Levantándose afectado, Lejarraga fue posteriormente sentado en el tapiz por un croché zurdo, del cual se levantó. No obstante, el árbitro, que realizaba cuenta a un Lejarraga apoyado en una esquina y que incluso hizo una sentadilla, inesperadamente decretó el final del combate.
Esto resultó una decisión muy sorprendente teniendo en cuenta que tras la primera caída dio incluso tiempo de más y le pidió al púgil que diese pasos hacia los lados. Además, Lejarraga parecía capacitado para intentar continuar. Posiblemente, tras ese comienzo arrollador de “Ava” no hubiese podido recuperarse, pero la detención pareció precipitada.
Sea como sea, el jarro de agua fría es ya un hecho, y Kerman Lejarraga, que pretendía rebotar con una victoria en la revancha ante el único púgil que le había vencido, se verá inmerso en nuevas dudas por esta derrota que llegó de forma inesperadamente contundente. Por su parte, David Avanesyan, al que no se le puede negar que hizo su papel a la perfección, se afianza como titular y apuntará a una nuevas negociaciones con Josh Kelly, su aspirante oficial, si bien el fracaso al intentar pactar anteriormente el combate ante dicho púgil británico hace que no sea seguro que ambos puedan llegar a un acuerdo, especialmente siendo posible que al ruso le propongan peleas interesantes al otro lado del Atlántico.
