Julio González
Baltasar Belenguer “Sangchili” no solo fue el primer campeón del mundo que dio el boxeo español sino que además fue el primer español que conquistó un título mundial de cualquier deporte.
Nació en Valencia el 15 de octubre de 1911. Su afición al boxeo surge en una tarde de agosto de 1921, mientras presenciaba en un cine de Valencia una película. Al término de la misma se proyectó el combate entre Jack Dempsey y Georges Carpentier y nuestro campeón decidió ser boxeador tras presenciar cómo Jack Dempsey noqueaba al francés en cuatro asaltos. Pero pasarían algunos años hasta que nuestro campeón decidiera debutar. Por esa época en España triunfaban en Barcelona los boxeadores Hilario Martínez y Ricardo Alis, valencianos y paisanos de Sangchili, lo que ayuda a aumentar su afición a nuestro futuro campeón.
Sería en 1927 cuando acude al gimnasio del señor Ricard, donde el preparador Santocildes es quien le dará las primeras clases del “noble Arte”. Pero en su casa no están de acuerdo con su nueva afición y su padre le prohíbe acudir al gimnasio, cree que es mejor que continúe con su trabajo en el taller de fontanería donde cobra un pequeño jornal. Para evitar que su progenitor se entere de sus combates decide ponerse el nombre de Sangchili, este nombre lo adopta de un chino, criado de un amigo de su padre que se llamaba Chang-Chi-Li.
Con el nombre de Sangchili, se va de Valencia a combatir en Málaga, Sevilla, Gibraltar, Granada, Alicante y Lisboa, donde vence al portugués José María Liberato. En una ocasión cuando regresó a casa después de un combate, su padre le esperaba sentado en la mesa, Sangchilli tenía un ojo inflamado después de la pelea, entonces intentó simular poniéndose en sentido contraria a su padre para que no pudiera darse cuenta del estado de su ojo, pero el padre le dijo que no era necesario que disimulara, pues había estado presenciando el combate.
Su debut profesional es confuso, en algunas biografías se produce el 1 de septiembre de 1928 en Valencia, ante Jimeno, y en otras ante Casanovas al año siguiente. Los siguientes tres años en su carrera están plagados de éxitos, vence a boxeadores de la talla de Tony Samber, Manuel González, Miguel Safont, Bautista y Emilio Iglesias. Pierde contra Sanz por descalificación, y por puntos contra el vallisoletano Antonio de las Heras, también con Fortunato Ortega, que en ese momento era el campeón nacional del peso mosca y Lorenzo Vitria, excampeón nacional gallo. En cuatro años como profesional había disputado cuarenta y un combates, y solo había sido derrotado en cuatro ocasiones y siempre con hombres mucho más experimentados.
En 1932 firma con el mánager y entrenador Jules Avernin, francés afincado en España y uno de los hombres que más sabe de boxeo en nuestro país. Avernin es uno de los hombres que convence al padre de Sangchili, de las cualidades de su hijo para la práctica del boxeo. A partir de la firma con Avernin la carrera de Sangchili sufre una variación, los rivales son cada vez más difíciles. Avernin había visto pelear a Sangchili y declara que es el boxeador que está buscando. Rápido, ágil en sus desplazamientos y muy eficaz en la corta distancia y muy valiente. El primer rival de categoría fue el francés Jean Cuart, hombre bien clasificado en el continente y que solo aguanta cinco asaltos a Sangchili en Barcelona.
La siguiente prueba es el tunecino excampeón mundial Víctor Young Pérez, al que vence por puntos en la Plaza de Toros de Valencia en las fiestas de Fallas. Sangchili, arropado por su público, consigue una importante victoria en su carrera. Seguidamente conquista el título nacional sobre el púgil de Artero, Carlos Flix, campeón nacional gallo y que años atrás había sido campeón de Europa del mismo peso.
Entonces llega su primera gran oportunidad de disputar el título europeo del peso gallo, en poder del belga Nicolas Petit-Biquet. Avernin convence a los empresarios valencianos y al mánager de Petit-Biquet para que el combate se celebre en Valencia. El 15 de julio de 1933, en la Plaza de Toros, Sangchili domina al belga, le acorrala, le persigue, le somete a su poderosa pegada, pero el zorro viejo belga, en cuanto puede se traba, aguanta y resiste los quince asaltos, y aunque el público de la plaza de Toros considera que Sangchili ha vencido por amplia mayoría, se queda de piedra cuando el árbitro suizo Mr. Desment, considera que el combate ha sido nulo. El escandalo es mayúsculo, la gente invade el ring, que se llena de sillas, botellas, almohadillas, el árbitro es golpeado y la policía de asalto tiene que sacarlo del recinto protegido hasta el hotel.
El delegado de la Federación Española el señor Casanovas acude a protestar al árbitro en el hotel y entonces se dan cuenta que el árbitro se ha equivocado en la suma de las cartulinas y que el vencedor es Sangchili. Entonces se convoca a los periodistas y se nombra campeón a Sangchili, enviando a la IBU la rectificación de las actas.
Pero el manager de Petit-Biquet al llegar a París pone el grito en el cielo y la IBU seis días después anula el combate y ratifica al belga en el trono europeo. El mánager belga manifiesta que el árbitro fue amenazado con una pistola en el pecho. El árbitro al ser preguntado se negó a contestar y el belga siguió siendo campeón oficial. Más tarde el organismo europeo IBU toma la injusta decisión de sancionar a la capital levantina con dos años sin celebrar títulos internacionales.
Pero esto no desanima a Sangchili que termina el año venciendo a los italianos Gori y Magnolfi y al francés Louis Legras. Si 1933 fue un buen año, no menos lo seria 1934. Comienza el año venciendo al excampeón europeo Víctor Ferrand en enero y al mes siguiente revalida el título nacional, en combate de revancha contra Carlos Flix, al hacer combate nulo en Madrid. Seguidamente vence a otra vez a Víctor Ferrand y se traslada a Argelia para enfrentarse a Young Pérez en combate de revancha. Hace dos combates en Argel, venciendo y dejando al público asombrado de su clase. Entonces se decide celebrar la revancha del título europeo, pelea que se disputa el 19 de agosto de 1934.
En esta ocasión el belga vence por puntos justamente, había dominado a Sangchili y le había vencido claro. “Subí enfermo al cuadrilátero y me venció con justicia”, manifestaría Sangchili después del combate. Cierra el año con un combate nulo en París ante el excampeón europeo Josep Decico. Importante resultado que tenía que haber sido victoria para el valenciano.
El año 1935 comienza con la victoria sobre Young Borrel en París (en la foto). De París pasa a Bruselas, y consigue otra victoria importante, ante otro excampeón europeo, Kid David. Todos los rivales de Sangchili son de primerísima categoría, regresa a Valencia el 18 de marzo para enfrentarse al campeón mundial del peso gallo, el panameño Panamá Al Brown, que se encontraba en Francia realizando una gira por Europa. Al Brown esta apadrinado en Europa por Bobby Diamond. El combate terminó en nulo y Juler Avernin que juega sus bazas de forma magistral convence a Diamond para que el panameño defienda el título en combate de revancha en Valencia. Después de un tira y afloja se llega a un acuerdo y la pelea por el mundial se firma en Valencia para finales de mayo.