Fue el primer campeón mundial que dio el boxeo español.
Trabajaba de fontanero en su pueblo cuando una tarde acude a Valencia a presenciar una película y vio el combate Jack Demsey-George Carpentier, decidiendo que el de púgil sería su futuro. En 1927 acude al gimnasio del señor Ricart, y Santocildes le enseña los secretos del boxeo. Sus padres se opusieron a la afición de Baltasar, y, para evitar ser descubierto en su debut, juntó el nombre del criado de un amigo de su padre llamado Sang Chi Li, y comenzó su carrera con ese apodo. Debuta como profesional el 29 de Abril de 1929 noqueando en dos asaltos a Casanova en Valencia. Sangchili escapó a Andalucía para poder boxear, pero la policía lo detuvo y lo devolvió a su casa ante la comprensible intransigencia de sus padres. Poco después se volvió a escapar. Su descubridor y manager, Jules Averin, lo vio boxear en Málaga y le organizó un combate contra el campeón de Portugal. Sangchilli fue a Lisboa, ganó y cobró la primera bolsa importante de su vida: 1.000 pesetas. Averin se entrevistó con sus padres y les convenció de que el chico tenía aptitudes para el boxeo. Su anatomía de 1,55 m. de estatura y 52 kilos de peso le convertía en un auténtico vendaval sobre el ring.
Pronto llegó el campeonato de España al vencer a Carlos Flix por puntos en Valencia el 22 de abril de 1933. El 15 de julio del mismo año en Valencia disputa el título de Europa ante el belga Nicolas Petit Biquet. El árbitro decretó combate nulo, aunque los aficionados protestaron airadamente por considerar que había merecido ganar el español. Al año siguiente, el 18 de agosto, se celebró la revancha en Argel (Argelia) y Biquet ganó por puntos, aunque Sangchilli siempre alegó problemas de salud para justificar esa derrota. Volverían a verse las caras por tercera vez en 1935, en combate sin título en juego, con resultado victorioso para el valenciano por K.O técnico en el décimo asalto.
A Sangchili no le hacía falta el título de Europa para llegar a lo más alto. Boxeaba de tú a tú con los mejores en los cuadriláteros de medio mundo. Tras pelear con “Panamá” Al Brown, “La araña negra”, sin título en juego, y hacer nulo en la plaza de Toros de Valencia el 18 de marzo de 1935, en la tradicional velada de San José, llega la oportunidad mundial con el mismo púgil. El título mundial IBU del peso gallo ahora sí estaba en juego. El campeón recibe 50.000 pesetas de bolsa, por 1.000 pesetas para el español. Brown no se preparó a conciencia ya que le gustaban mucho las fiestas, y el valenciano aprovechó la oportunidad para proclamarse campeón mundial, tras vencer por puntos en quince asaltos el 1 de junio de 1935. En aquellos tiempos el boxeo estaba confuso y había varios organismos que hacían campeonatos mundiales. El 29 de junio de 1936 ante el norteamericano Tony Martino en Nueva York, Sangchilli pierde por K.O. en el decimocuarto asalto el título mundial de los gallos, alegando que le habían narcotizado.
En 1937 está inactivo, y el 4 de marzo de 1938, ante Al Brown nuevamente, esta vez en París (Francia), pierde por puntos la posibilidad de ser nuevamente campeón mundial del peso gallo, en decisión polémica de los jueces. Colgó los guantes en 1939 tras proclamarse nuevamente Campeón de España del peso gallo. Sangchilli contrajo matrimonio con una trapecista francesa y se enroló en el circo, donde realizaba espectaculares exhibiciones de salto de comba. También abrió un gimnasio en Torrente (Valencia) y se convirtió en preparador y mánager de boxeadores. Un trágico accidente doméstico se lo llevó para siempre el 2 de septiembre de 1992 en la Villa Sangchili de su localidad natal, la casa que había comprado en su época de campeón.
Emilio Marquiegui – Julio González
|