Anoche en Riad (Arabia Saudí), se celebró una de las veladas más importantes de la historia del boxeo, por muy osado que parezca esa afirmación, con siete choques que fueron títulos mundiales o interinos y que cada uno de ellos podría ser digno cabeza de cartel en cualquier función.
Para inaugurar esos espléndidos combates, organizados por Turki Alalshikh a la cabeza de los mejores promotores del globo, era el título WBC interino semipesado, expuesto por el londinense Joshua Buatsi (19-1, 13 KO) ante su compatriota Callum Smith (31-2, 22 KO).
Fue una guerra de poder a poder que Buatsi comenzó ligeramente más entonado, pero Smith equilibró y fue llevando a su terreno en los parciales intermedios, teniendo sentido a su rival en un espléndido sexto round. Siempre desde entonces llevó más iniciativa el espigado boxeador de la famosa saga, teniendo mejores prestaciones que Buatsi, aunque finalmente los llamados asaltos de campeonato fueron complicados de puntuar, por la tremenda igualdad en alguno de ellos.
Las cartulinas hicieron que, por decisión unánime, el cinto interino y la opción de acercarse al mundial cambiasen de mano: 119-110 de Steve Gray (directamente para deportarlo a Reino Unido) y dos más normales de 116-112 y 115-113, muy atinado, a favor de Callum Smith. Gran refriega para dar pistoletazo de salida a una sobresaliente velada.
