Daniel Pi
@BastionBoxeo
Puede que a muchos la destreza promocional de Golden Boy Promotions no les engañe y que puedan ver la realidad tal y como es. No obstante, son tantos o más los que, cegados por las luces y los halagos desmesurados, han sucumbido a la mentira y han repetido hasta la saciedad, contagiados por el entusiasmo de la propaganda, las consignas que cada día acercan un paso más a Canelo al Salón de la Fama del Boxeo, en el que jamás un púgil que ha dado positivo en control antidopaje debería poder ingresar.
Parece que el tiempo todo lo borra, y muchos periodistas consideran más apremiante alabar la mejora técnica de Canelo, o hablar de cómo de bonito es su nuevo coche, que preguntarle si ha puesto, como se dice, una cláusula de rehidratación cuya divulgación por parte de Kovalev o su equipo estaría penalizada con una multa de varios millones de euros. Asimismo, respecto a su legado, los medios han preferido repetir, aunque es mentira, que Canelo el próximo sábado podría entrar en el grupo de mexicanos que han sido monarcas mundiales en cuatro categorías, pareciendo que consideran un esfuerzo demasiado exigente explicar que realmente Álvarez no ha sido monarca en el peso supermedio, ostentando sólo un cinto de subcampeón WBA adquirido ante un Fielding que fue vencido en sólo un round por el verdadero titular mundial WBA, Callum Smith.
Da igual que los hechos objetivos contradigan la versión oficial, quienes los apuntan son tratados como si les moviese a ello un afán personal, una rencilla sin resolver, y no el respeto que sienten por un deporte como el noble arte cuyos valores están infinitamente por encima de la falta de honradez que preside la conducta de muchos.
Aunque el próximo sábado en el MGM Grand de Las Vegas (Estados Unidos) se producirá un combate que está señalado como uno de los más destacados de la temporada y que será seguido por gigantescas audiencias, y si bien puede tener cierto interés aunque sea desde del mero afán de no perderse ningún campeonato, por presenciar un espectáculo socio-cultural o por ver su respaldo, el caso es que el campeonato mundial WBO del peso semipesado entre el mexicano Saúl “Canelo” Álvarez (52-1-2, 35 KO) y el titular ruso Sergey Kovalev (34-3-1, 29 KO) no es la abierta pelea que se dice que es. De hecho, según Óscar de la Hoya, promotor de Canelo, es un combate complicadísimo para su púgil:
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“Creo que Canelo vio algo en él, en su armadura. A lo mejor hay una brecha en su armadura, pero cuando peleó por el título mundial [Kovalev-Yarde] no vi ninguna debilidad. No vi ninguna. Peleó contra un tío joven, posiblemente más fuerte de lo que lo es Canelo, y lo noqueó con un jab. Creo que Kovalev está mejor que nunca. Pienso que no está como cuando peleó contra Hopkins, pero no está lejos de ello”.
Lógicamente afirmaciones como estas, que caen por su propio peso, son comprensibles viniendo del promotor organizador del campeonato, si bien lo realmente triste es que cosas similares hayan sido repetidas por algunos miembros destacados de la prensa estadounidense, que han intentado por todos los medios vender que el enfrentamiento es un reto en el que Canelo lo tiene todo en contra.
Sin embargo, estas visiones chocan con la realidad, en concreto con un hecho increíblemente llamativo: que el peso medio que sube dos divisiones para retar a un campeón mundial del semipesado es el favorito y no el monarca, y con una ventaja de 1,25 € por 4,00 €. Dicho de otro modo, los expertos de las casas de apuestas no tienen ni remota duda de que Canelo vencerá, puesto que incluso sopesando en su contra factores tan negativos como la diferencia de tamaño, han seguido arrojando una sólida cifra de favorito, algo impensable en un enfrentamiento cualquiera entre un peso medio y un peso semipesado disputado en la categoría del segundo.
Como contrapunto a quienes ven el encuentro como una epopeya para Canelo, han surgido muchas voces que no lo ven de la misma manera, como el entrenador Ábel Sánchez, que ha señalado:
“Canelo tiene algo que fue muy llamativo en su última pelea y eso fue su movimiento de cintura. Kovalev es grande y fuerte, e intentará jabear y no lo va a encontrar y Canelo va a golpear el cuerpo de Kovalev fuerte. Creo que en entre siete y diez rounds, Canelo puede noquearle”.
Por otro lado, otro destacado entrenador, Teddy Atlas, indicó:
“Está decantado del lado de Canelo, porque se va a enfrentar a un tío más viejo, con un pie fuera, que es vulnerable, y eso lo ha mostrado en su última pelea. Es vulnerable y llega de una pelea dura y no va a tener ningún descanso prácticamente. Va a ir directamente, así que tiene el margen ahí. Pero al otro tío [Kovalev] le van a pagar a base de bien para que lo haga”.
Como señala Atlas, lo cierto es que los factores en contra de Kovalev se amontonan, ya que, si bien en su último duelo dominó a un Yarde que no tenía ninguna experiencia de calidad y que no tuvo recursos para hacer la pelea sostenidamente contendida al margen del crítico octavo round, el combate fue exigente físicamente para un boxeador conocido por sus problemas de fatiga. Además, debemos recordar que Kovalev sólo tuvo 10 semanas entre el duelo ante Yarde y el combate de este sábado ante Canelo.
Por otra parte, la preocupación por este factor se ve vinculada a la confirmación de que, si pierde ante Canelo, Kovalev recibirá por parte de DAZN unos buenos cheques de despedida en forma de acuerdo de dos combates, de modo que se cuestiona qué ambición deportiva le queda a “Krusher”.
Enlace al artículo que explica el posible salto de Kovalev a DAZN
Finalmente, aunque no por ello menos importante, se habla de que Kovalev es un boxeador de una dimensiones nunca vistas por Canelo, pero esto es falso, ya que el veterano púgil sólo es 1 cm más alto que Daniel Jacobs, quien tiene un alcance de 1 cm más que el monarca del peso semipesado. Por si esto fuese poco, lo cierto es que Jacobs es un boxeador físicamente más fuerte, en mejor estado de forma, más explosivo, con mejor boxeo en corta y que, según se dice, rehidrata monstruosamente hasta acercarse al peso crucero el día del combate, elementos que no le sirvieron para evitar la derrota ante un Canelo que no tuvo problemas para acortar la distancia, evitar los rápidos jabs del estadounidense y descargar combinaciones.
Dicho esto, algunos señalan que la pegada de Kovalev es algo que no se puede menospreciar, pero se olvidan de decir que el uso de la derecha recta de este en sus últimos combates se ha reducido drásticamente, dependiendo casi exclusivamente de su excelente jab para controlar la pelea a los puntos y evitar desfondarse al poner poder en sus puños como antes hacía, de modo que su contundencia de golpeo de media ahora es mucho más reducida. Recordemos también que Canelo fue alcanzado por temibles puños por parte de Golovkin y no sintió ninguno de ellos, algunos verdaderos mazazos, por lo que parece poco probable que los dosificados golpes de un Kovalev con miedo a perder sus energías vayan a dañar al mexicano como hasta ahora nadie lo ha hecho.
Quizás, si Kovalev maneja bien su directo de mano adelantada e insiste en él sin descuidarse podría ofrecer una primera mitad contendida o incluso favorable para sus intereses, pero ¿cuánto tardarán sus fuerzas una vez más en abandonarle?, ¿cuánto tardarán en llegar los ganchos zurdos de Canelo al torso que podrían menoscabarle más rápido de lo que lo hicieron los de Yarde?, ¿cómo peleará en corta cuando sus piernas le abandonen y tenga que recurrir a un boxeo sin espacios en el que es extremadamente limitado? Por último, ¿si consigue llegar a las puntuaciones, habrá logrado impresionar a los jueces en Las Vegas con su jab más que Canelo con sus combinaciones de curvos?
Es por todo esto por lo que se piensa que, aunque un Kovalev en verdadera plenitud podría haber noqueado brutalmente a Álvarez, será muy difícil que Canelo no alce el cetro WBO el próximo fin de semana y reclame como una nueva “gesta” ser el segundo mexicano que tiene un título del peso semipesado tras Julio César González (2003).
La velada del Canelo-Kovalev, que contará con el Jorge Fortea vs. Bakhram Murtazaliev, será emitida en España por DAZN desde las 23:30 h del sábado.
