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El campeón de España semipesado, de origen cubano, Carlos Lamela (8-3, 5 KO) dio una gran alegría al boxeo español al conseguir una importante victoria en Viena (Austria) hace unas semanas, derrotando al imbatido púgil local Mansur Elsaev (18-1, 16 KO) y logrando el título Silver EBU.
Pero todavía nos acordamos del escándalo final del entrenador y aficionados de Elsaev subiendo al ring después del final del combate a agredir a Lamela, tras unos gestos desafortunados de este. «Mi gesto estuvo mal, pero fue un momento de euforia, en ningún caso iban dirigidos a él o al público».
«No voy a ir a pelear a cualquier sitio y perder mi puesto en Europa»
Lamela y su equipo, con su entrenador Luis Jaime Escudero y su mánager Rubén Solé, pasaron un buen susto. «Me pegó su entrenador, aunque creo que ya me tenían ganas por la derrota, independientemente de mis gestos. La verdad es que fue un buen susto».
El austríaco era el claro favorito por la potencia de su pegada. «Pegaba duro, está claro, pero solo sentí dos o tres golpes, porque yo los veía venir y los absorbía. No lo pasé mal».
Tras la victoria, Lamela tendrá que elegir si quedarse con el título de España o con el Silver EBU. «A ver qué hago con el título de España, pero lo que está claro es que no voy ahora a perder mi posición de número cuatro de Europa por ir a pelear a cualquier sitio. Prefiero combatir en casa que ir a perder la oportunidad. El dinero es importante, no cabe duda, pero he de pensar en el título de Europa».
«Ahora quiero sentirme fuerte»
El título europeo ahora está vacante y lo tendrán que disputar en breve el inglés Shakan Pitters (19-2, 6 KO) y el francés Daniel Blenda Dos Santos (21-1, 10 KO). Los púgiles que preceden en las listas europeas a Lamela no parece que vayan a disputar el europeo, como son los británicos Anthony Yarde, Callum Smith o Lyndon Arthur, más preocupados por el título mundial. «Tengo mucha ilusión y estoy muy contento, quiero cambiar los entrenamientos de cara a combates de importancia y sentirme fuerte».
Con suerte, quizás tengamos a Lamela peleando antes de que termine el año por el campeonato de Europa semipesado, algo que solo ha conseguido un español en la historia, el valenciano Martínez de Alfara hace casi cien años, en 1934.