Claressa Shields (15-0, 3 KO), autoproclamada a diario en redes la mejor boxeadora de todos los tiempos, buscará un nuevo hito en su carrera profesional.

Doble campeona olímpica en Londres 2012 y Río 2016, la estadounidense ha arrasado en el boxeo rentado, siendo campeona mundial del peso superwélter, medio (tras su brillante triunfo ante Savannah Marshall), supermedio, semipesado y pesado.

Shields ha aprovechado la escasa oposición de los pesos más elevados del boxeo femenino para ir consiguiendo estos títulos. Por ello, en su último pleito, que data de julio del año pasado, se impuso sin dificultades noqueando en el segundo asalto a Vanesa Lepage-Joanisse (7-2, 2 KO). La canadiense era campeona mundial WBC y también la WBO se unió a la fiesta, poniendo en juego su título semipesado vacante.

Ahora en febrero, la petulante púgil buscará ser campeona de todos los organismos del peso pesado. Se medirá en Flint (Estados Unidos) a Danielle Perkins (5-0, 2 KO), de 42 años. Pondrá en juego su cinturón WBC y se unirán a la fiesta todos los demás, puesto que la IBF, WBA y WBO otorgarán sus fajas de la categoría, todas ellas vacantes. La gala será organizada por Salita Promotions.

Mientras tanto, la idea de Shields de pelear contra un hombre sigue guardada en un cajón. Sus habituales publicaciones en redes sociales jactándose de poder vencer a compañeros profesionales se han visto frenadas en varias ocasiones, la última cuando se la vio caer en un guanteo contra un púgil retirado de récord 6-1, Arturs Ahmetovs.