El excampeón mundial Danny García ha declarado que podría retirarse del boxeo profesional.

García perdió este pasado sábado contra Erislandy Lara antes del límite, acusando los golpes del cubano y, sobre todo, la prolongada inactividad que arrastraba. Pese a ello, la WBA le regaló la oportunidad de aspirar al título mundial del peso medio, categoría inédita que le quedó muy grande, como preveíamos. La esquina, comandada por su padre Ángel (ambos en la foto), decidió detener el pleito en el noveno round, viendo que el estadounidense no tenía opción alguna ni fuerzas para finalizar.

Tras crear Swift Promotions, García piensa que podría haber dicho adiós este sábado en Las Vegas y centrarse ahora en su carrera como promotor, con 36 años y solo dos combates desde 2020: «Tengo que sentarme y pensarlo bien. Estoy de acuerdo con que mi padre parase la pelea, no tengo dudas, él quiere lo mejor para mí. Quiero disculparme con mis seguidores, lo intenté, pero no tuve mi noche. Simplemente es eso, no me salieron las cosas y no hay que poner ninguna otra excusa».