Tras muchos años en los que alternaban enfrentamiento descarnado (usando a la prensa y redes sociales) con guerra fría, los dos principales promotores británicos han sacado la pipa de la paz.
Por primera vez, Eddie Hearn (Matchroom Boxing) y Frank Warren (Queensberry Promotions) se veían cara a cara en un evento hace semanas, cuando se presentó el evento de este pasado sábado del que formaban parte. El novedoso formato de Arabia Saudí, con mucho dinero sobre la mesa, hizo que los mejores promotores del mundo aportasen boxeadores para quedarse con parte del pastel y, a la vez contribuir para la calidad del show.
Hearn y Warren dieron un paso más estos días en tierras asiáticas, estrechándose la mano y siendo entrevistados juntos. Buscan que este sea el punto de partido para que el futuro sea mucho más próspero para un deporte que necesita este tipo de buenas noticias.
Para el de Matchroom, «siempre habrá rivalidad, pero no somos tontos. Adoramos este deporte y sabemos aprovechar este tipo de grandes oportunidades. Tal vez Warren no sea tan malo después de todo, nunca he visto un evento como este y podemos sacarle partido todos, dejando de lado la competencia». Warren declaró que «no podemos permitirnos arruinar esto, los boxeadores han recibido muy buenas bolsas y no debemos impedirlo por otros motivos nuestros. Habrá más peleas espectaculares el próximo año y trabajaremos asociados en unas cuantas veladas».