Por fin, tras meses de tira y afloja, se ha podido llegar a un acuerdo para que puedan enfrentarse los carismáticos Conor Benn y Chris Eubank.
Hace dos años y medio, en octubre de 2022, ya se iba a celebrar este duelo entre británicos, hijos de leyendas que se enfrentaron dos veces, en 1990 y 1993. Recogían el testigo de sus padres cuando Benn daba positivo en un control antidopaje previo, algo que se intentaba esconder desde la promotora Matchroom Boxing, organizadora del evento, pero que saltó a la palestra por una filtración interna. El pleito fue suspendido, Eubank siguió su camino y el cazado empezaba un oscuro proceso de sanciones medio encubiertas de la comisión británica, perdones de un organismo tan beligerante con el dopaje como el WBC y casi empezar su carrera de cero.
En 2024 ambos subieron solamente una vez al ring, Benn imponiéndose a Peter Dobson en febrero y Eubank venciendo a Kamil Szeremeta en octubre. Ahora parece ser ya seguro que el 26 de abril se verán las caras entre ellos finalmente, si no hay lesiones, dopaje o algún otro factor de por medio.
El escollo más difícil era el peso pactado para el choque, puesto que Conor Benn ha sido toda su carrera un peso wélter y Eubank ha militado entre el supermedio y el medio, siendo esta última la categoría donde milita los últimos años. Acerca de ello, se ha cerrado el acuerdo en las 160 libras del límite medio, unos 72 kilos y medio, con rehidratación de diez libras (4,5 kilogramos) para el día del envite. Son cuatro libras más de las 156 en que se pactó su primera y nunca celebrada contienda. La única duda reside en dónde se realizará el evento: hace unos meses, cuando volvían los rumores y negociaciones, debía ser en Arabia Saudí por la sanción de Benn para pelear en Reino Unido. Ahora ya no existe ese problema y podrían enfrentarse en un gran estadio británico; se rumorea que el del Tottenham Hotspur es el favorito.