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Eloy Iglesias, que hasta ahora era campeón de España del peso ligero, parece que había sido aconsejado por la Federación Española de Boxeo para que abandonara el título ya que no lo había defendido en los plazos previstos (aunque solo hacía seis meses que hizo su última defensa ante Pablo Fuego), según testimonio de su mánager Miguel Ángel García.
Le comentaron que Frank Urquiaga era el único púgil que había solicitado disputarlo.
Según afirma el mánager de Iglesias, se llegó a un acuerdo entre varias partes para que el zaragozano dejara el título y después sería aspirante preferente y pelearía ante el ganador entre Frank Urquiaga y otro que buscaran. Incluso se hablaba del ¡¡peso pluma!! Iván Tomás.
Siempre debería ser obligatorio que los campeonatos de España los disputen los mejores y no se busquen campeonatos-puente para que los disputen púgiles secundarios. Si el campeón quiere dejarlo por cualquier motivo, que lo deje, pero no para volver a disputarlo después, dependiendo de quién haya ganado u otros intereses.
Puestos al habla con los mánager de Eloy Iglesias y de Frank Urquiaga, ambos estarían encantados de disputar el título de España del peso ligero, dado, además, que Eloy Iglesias no tiene porqué abandonar la corona por disputar un título intermedio IBF.
La Federación Española de Boxeo, con buen criterio, ha concluido con la situación señalando que al no recibirse la renuncia oficial de Eloy Iglesias, este siguen siendo el campeón y marcará unos plazos para la subasta ante el aspirante oficial, que será Frank Urquiaga. Buena decisión de la FEB, que sigue teniendo como objetivo primordial que la EBU clasifique adecuadamente a los campeones nacionales, pero para ello, los campeones nacionales deberán ser los mejores de nuestro país.
