El excampeón mundial Ginjiro Shigeoka ha sido operado en Japón del hueso orbital de su ojo derecho, con buenos pronósticos, aunque lentos, de recuperación total.

Shigeoka ostentaba el título mundial IBF del peso mínimo hasta hace unas semanas, pareciendo imparable hacia el estrellato. Su juventud, poderío en la pegada y boxeo atractivo le hacían postularse como un gran campeón para muchos años en el país oriental.

Sin embargo, el ring pone a cada uno en su sitio y tuvo que ceder la cpondición de imbatido y la corona mundial ante el filipino Pedro Tadurán, que impuso su experiencia y su ritmo infernal con una frecuencia de manos poco habitual. El daño al nipón fue severo y, tanto su esquina como el árbitro y el doctor, permitieron demasiado castigo al maltrecho boxeador.

Muchos aventuraban daños permanentes al menor de los Shigeoka, pero parece que la recuperación será completa para poder retomar su carrera deportiva.