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Manuel Sánchez
Presidente de la Federación de Boxeo de les Illes Balears
El caos en el que está sumido el boxeo español bajo la presidencia de Felipe Martínez registró uno de sus capítulos más negros este sábado en la localidad cántabra de Castro Urdiales. Toda España pudo presenciar a través del canal GOL una imagen lamentable de nuestro deporte en el «combate» que disputaron Jorge Vallejo y Davor Matic. El riojano consiguió una obligada victoria que le permitirá pelear por el cinturón nacional, con un cuestionable récord profesional de cuatro victorias y tres derrotas, autorizando el Comité de Boxeo Profesional y a la postre, Felipe Martinez, esta pelea para que el supervisor y los jueces agraciados puedan disfrutar de unas vacaciones a gastos pagados en la Costa del Sol.
Lo más grave es que Davor Matic venía de encajar cuatro derrotas antes del límite en tres meses, la última ¡sólo siete días antes de pelear con Vallejo!, siendo noqueado en Alemania ¡en el primer asalto!, como puede comprobarse accediendo a su récord en BoxRec. La salud de los boxeadores está en riesgo en algunas comunidades autónomas donde no se respeta el reglamento, y el Comité de Boxeo Profesional mira hacia otro lado para beneficiar a sus amigos. La Federación Cántabra estaba en la obligación de no autorizar esta pelea propuesta por MGZ, aunque Matic contase con un permiso de desplazamiento, ya que podía haberse producido una desgracia y contradice el Reglamento de la FEB , ¿o es que ahora se van a autorizar todos los combates cuando los boxeadores presenten el permiso de desplazamiento? La pasividad en esta asunto del Comité de Boxeo Profesional contrasta con su actuación anteriormente, torpedeando combates plenamente legales como los de Luca Giacon, a pesar de no contar con la competencia para ello, sólo por el hecho de que los promotores del malagueño quieren abrirse paso en el boxeo español.
Para más inri, actualmente la Federación Cántabra es dirigida por una Junta Gestora a la que Felipe Martínez ha dado su apoyo públicamente, apareciendo en BoxRec la propia Federación Española de Boxeo como la encargada de supervisar la velada de Castro Urdiales. Además, minutos antes, Haritz López De la Calle peleó con otro bosnio, Marko Dmitrovic, de 17 años, algo llamativo cuando en España no se expide licencia profesional a los menores de edad, a no ser que este contase con una autorización del CSD (que todos sabemos que no). Estos no son son los primeros graves errores del Comité de Boxeo Profesional en suelo cántabro. El pasado 18 de marzo en Maliaño el nicaragüense Geiboord Omier peleó con Bruno Ortega una semana después de sufrir otra derrota. ¿Qué está pasando? La desorganización en el equipo que dirige Felipe Martinez, puede acabar en tragedia para esta estigmatizada disciplina, así como estas actuaciones partidistas son muy contrarias para la propia FEB en los juicios que tendrá en los próximos meses por las presuntas diferentes ilegalidades cometidas en el caso Luca Giacon. A buen seguro que estas diferencias de criterio seran utilizadas por el demandante contra la FEB para acreditar su mala fe al prohibir el combate de Giacon.
A Felipe Martínez no le queda otra que depurar responsabilidades y actuar con la máxima rapidez para sancionar a. Los miembros que constituyen la Junta Gestora de la Federación Cántabra y al equipo del Comité de Boxeo Profesional, que son los principales señalados. Los casos se le acumulan al Comité de Disciplina, mientras el presidente de la FEB gasta cantidades desorbitadas en abogados. El Comité de Disciplina ni está ni se le espera por el momento, a pesar de haber amenazado a diversas territoriales con su actuación el propio Comité de Boxeo Profesional, habiendo pasado ya seis meses desde la escándalosa velada de Carranque, donde Agapito Gómez actuó tanto de árbitro como supervisor, y a día de hoy no se ha tomado ninguna medida. Por el bien del boxeo, es obligatorio acabar con estos lamentables hechos, y no pasar página, así que esperaremos que en recién creada web del Comité de Boxeo Profesional (que ha tardado seis meses más de lo prometido en inaugurarse), nos informe de las medidas que se han tomado.
Con estas irregularidades que afectan a la salud de los boxeadores, ya son varias territoriales las que no firmarán ningún convenio con Felipe Martínez, quien presume de cohesionar al boxeo español, empezando por la que preside el que suscribe estas líneas. Los empleados de la FEB (indistintamente de su régimen laboral) tienen que trabajar para proteger a los deportistas, en lugar de publicar fotos con sus amigos y familiares en los perfiles oficiales de la propia federación.
