Daniel Pi
@BastionBoxeo

La gran pregunta de cara al campeonato de Europa del peso gallo disputado el sábado en la Salle la Soucoupe de Saint-Nazaire (Francia) era si el veterano retador Karim Guerfi (29-4, 9 KO) (en la imagen) estaría en las mejores condiciones a pesar de su falta de ring reciente. Esta cuestión fue respondida por Guerfi con una tremenda actuación en la que logró destronar al monarca Georges Ory (11-3-1, 1 KO) con un KOT en el décimo asalto de un espectacular combate.

El campeonato comenzó con Guerfi avanzando sobre su rival buscando golpes de poder en directo diestro, croché zurdo y gancho de izquierda al torso, por lo que obligó al zurdo Ory a responder con combinaciones de hooks diestros arriba y abajo acompañados posteriormente por pasos laterales. Así, ofreciendo el aspirante peligrosas ofensivas y el campeón firme respuesta, el choque tuvo intensidad y emoción desde el inicio, provocando un choque de cabezas en el segundo asalto un corte en la ceja izquierda de Ory.

Preocupado por la brecha, Ory salió más agresivo en el tercer round, conectando buenos crochés de izquierda, pero Guerfi contraatacó con fuertes directos y ganchos zurdos, empujando hacia las cuerdas a su adversario. La tónica de la pugna se mantuvo, con oscilaciones en la posesión de la iniciativa y con intercambios de golpes en los que ambos eran nítidamente alcanzados e incluso sacudidos, pero ninguno de los dos lograba un trascendental punto de inflexión.

De todos modos, Guerfi, que parecía una o dos divisiones más grande, que contaba con ventaja en pegada y que sabía gestionar mejor tanto el tiempo de round como el uso de las acciones defensivas, se llevó la mejor parte en los cruces de golpes y conectó los puños más claros de cada asalto. No obstante, Ory se negó a ceder y siguió esforzándose por acortar la distancia en las puntuaciones con aguerridas combinaciones de curvos con las que conseguía anotarse algunos asaltos, si bien en ocasiones su empuje le llevaba a encajar fuertes contragolpes.

Sin saberse cómo les podían restar energías y cómo podían evitar tocar la lona, especialmente en cuanto a un Ory que estaba siendo más castigado y que tenía el ojo izquierdo cerrado (en torno al cual sufrió un corte más grave aún), ambos siguieron luchando por la victoria en una batalla cargada de intercambios, aunque en este último tramo la superioridad del experimentado aspirante se hizo más clara. Por ello, con la pelea decantada a los puntos del lado de Guerfi y con el ojo de Ory en pésimo estado, antes de que se iniciase el décimo asalto el médico aconsejó al árbitro detener el encuentro, algo que hizo de manera completamente acertada.

A pesar de las críticas que se le pudiesen hacer a Ory por sus anteriores actuaciones, ante el adversario de más experiencia y con mayores victorias que ha tenido frente a sí mostró una valentía tremenda, contestando en todo momento y manteniendo contendida la pugna. Sin embargo, Guerfi terminó imponiéndose para volver a reinar en el continente dos años después de que se produjese su última defensa, siendo un campeón más sólido y complejo que Ory y que, por lo tanto, supondrá un reto de mucho mayor calado para los que quieran arrebatarle su trono.