
Después de ser campeón total en los pesos superligero y wélter, el siguiente reto de Terence Crawford es el más difícil de su carrera; una locura, más que un reto, para muchos analistas y aficionados al mundo del boxeo, dadas las circunstancias que lo envuelven. Crawford se enfrentará a Saúl «Canelo» Álvarez en el mes de septiembre. El mexicano es el campeón unificado del límite supermedio y, si se impone dentro de unos días a William Scull, será el poseedor de todos los títulos de la categoría, privilegio que ya ostentó durante un tiempo.
Las dos premisas nos llevan a una inequívoca conclusión: en caso de imponerse a Canelo, Crawford sería el primer boxeador que tuviera en sus manos los cuatro títulos mundiales (IBF-WBA-WBC-WBO) de tres divisiones diferentes. ¿Cuál es el problema, el reto al que aludíamos en la entradilla de la noticia? El trecho entre el peso wélter y el supermedio, peso este último en el que el pelirrojo mexicano lleva estable durante cerca de un lustro, con un cuerpo plenamente hecho a él.
Bien es cierto que hemos omitido que Crawford ya comenzó con esa transición necesaria, seguro que con Canelo en mente, en su último choque. Su aparición anual de 2024, frecuencia que mantiene en los últimos ocho años, fue ya en el superwélter, imponiéndose quizá al mejor del peso, Israil Madrimov, en un pleito bastante igualado. Pero aun así, de casi 70 kilos a más de 76 kilos (154 libras de esta categoría a las 168 del supermedio) hay un mundo, más de 6 kilos. La altura, antes de que alguien se adelante, no es un problema, pero sí la estructura del cuerpo, su musculatura, su fortaleza, su hábito a esta masa de cara a mantener la velocidad.
Muchos han hablado de la necesidad de Crawford de subir al ring antes como aclimatación necesaria para esta cita, algo que ha sido ofrecido por Turki Alalshikh, organizador del megacombate con Canelo. Es una corriente de opinión a la que se ha adherido Jaron Ennis, recientemente proclamado campeón mundial WBA-IBF del peso wélter. Para él, es exagerado subir tantos kilos, por lo que cree que su compatriota se equivoca al ir directamente contra el mexicano sin haber subido al ring durante más de un año y en una división tan diferente: «Creo que Crawford debería hacer una pelea de rodaje aproximadamente en el límite del peso medio, para acostumbrar a su cuerpo a medirse con alguien más grande y además para mantenerse a tope y pisar el cuadrilátero. Visto que no lo hará, pienso que Canelo se puede llevar el combate, porque lleva un tiempo que hace daño incluso a rivales más corpulentos. Por eso le puede dar la noche a Crawford», declaró a la prensa.