Tras otra demostración como la realizada en Philadelphia este pasado sábado, el asombroso Jesse “Bam” Rodríguez ya piensa en su próximo paso.
El estadounidense defendió con éxito y contundencia su título mundial WBC supermosca y tiene dos cosas claras. La primera es deportiva y la segunda es personal.
Bam quiere unificar coronas con los mejores de la división, por eso estará muy atento al duelo por el título WBA de fin de año en Japón, entre el campeón Fernando Martínez (que también lo era de la IBF hasta hace unas semanas) y Kazuto Ioka.
Sería un gran combate para apostar, tan emocionante como jugar al poker, algo que los aficionados al boxeo también saben practicar.
Pero este choque de revancha tiene otro aliciente para Rodríguez. Ioka fue quien derrotó a Joshua Franco, hermano de Bam, antes de su retirada. Por tanto, cree que tiene cuentas pendientes con el nipón y le gustaría vengar deportivamente a su hermano.
En caso de no lograrse la unificación ni el pleito con Ioka, se ha hablado de Román “Chocolatito” González como otro plan para Jesse Rodríguez. La pelea sería relativamente fácil de lograr, al tener ambos contrato promocional con los japoneses de Teiken.