Gómez-Hadri

Redacción ESPABOX

Esta noche de sábado en Lagny-Sur-Marne, a las afueras del entorno de París, el Mago alicantino Juanfe Gómez se ha dejado su título europeo del peso superpluma en tierras galas. Pero además por méritos propios, y ante un rival de boxeo discreto, al que le llegó un regalo inesperado.

Gómez (13-1-1, 2 KO) visitaba al francés Khalil El Hadri (19-2, 9 KO) y no ha tenido su mejor día, en un pleito con poca actividad, no muchas acciones de calidad técnica para el nivel más alto a nivel continental y escasa continuidad en las acciones. Gómez fue a por la pelea en contadas ocasiones y se conformó con buscar alguna contra.

Tras unos asaltos iniciales de estudio, Juanfe pasó al ataque al ver que El Hadri no tenía intención de exponerse a sus contras, pero lo hizo sin acabar de entrar en la pelea del todo, con manos deslavazadas y permitiendo que el local (sin ser nada del otro mundo) estuviera más cómodo. El ilicitano hizo algunos rounds interesantes, como el octavo o el undécimo, porque logró una ofensiva más sólida, presionando al aspirante y llegando a producirle un corte por golpe, pero no pudo rematar la faena y su lenguaje corporal anunciaba lo que vendría. Juanfe no presionó lo que debía ante un rival que tendría que haber sido inferior, y no estuvo a la altura de lo que debe demostrar un campeón de Europa. Juanfe tiene mucho más boxeo pero no lo puso en práctica esta noche. Una lástima porque el rival era asequible.

Dos de los jueces otorgaron puntuaciones excesivas para el francés, con sendos 117-111, y el tercero 115-114 también para el francés. Pudimos ver hasta un empate, como máximo, porque no fue una pelea de garra y se igualaron algunos asaltos, a veces insulsos.

Por desgracia, el boxeo masculino español se queda sin ningún campeón de Europa, mucho tiempo después de la última vez. Suerte para Juanfe Gómez en su próximo intento de recuperar la corona.