El mexicano Julio César Martínez ha dado positivo por varios diuréticos y enmascaradores de sustancias en los controles que se le hicieron en su pelea del 30 de marzo pasado.
“Rey” Martínez puso su título WBC del peso mosca en juego esa noche ante Angelino Córdova en Las Vegas, venciendo por decisión mayoritaria (el resultado será cambiado a No Contest, borrando de los registros ese triunfo). El mexicano ya había dado positivo hace años por clembuterol, pero fue perdonado por el Consejo al alegar contaminación de carne ingerida. Todo ello pone, una vez más, en entredicho los mecanismos de control del boxeo respecto al dopaje.
La comisión atlética del estado de Nevada (donde está Las Vegas) ha impuesto a Martínez, que planteaba subir al peso supermosca, una ridícula sanción de nueve meses, además con inicio tras la fecha del referido duelo. Por tanto, podría boxear ya a comienzos de 2025.
