
El excampeón mundial estadounidense Keith Thurman regresará al cuadrilátero mañana en Sidney (Australia), dentro de una gala organizada por No Limit Promotions.
Thurman (30-1, 22 KO) es una de las más claras víctimas de PBC en los últimos años, puesto que solo ha disputado una pelea en esta década, ya mediada. Fue en 2022, imponiéndose por decisión unánime al actual campeón mundial Mario Barrios. Además de la habitual dinámica de su promotora, Thurman ha sufrido una lesión en el bíceps que ha impedido subir al ring al excampeón mundial del wélter, que llegó a tener a la vez las coronas WBA y WBC. A sus 36 años, busca una última oportunidad de reengancharse a la élite, algo imposible si sigue su ritmo de pelear cada treinta meses, su ritmo habitual.
Su rival a diez rounds será el australiano Brock Jarvis (22-1, 20 KO), pegador con una curiosa (otros dirían sospechosa) transformación de un enclenque peso gallo hace un lustro a un fortísimo superwélter en la actualidad. Su carrera se ha construido frente a flojos rivales locales; en el único test serio que ha tenido, fue noqueado por Liam Paro en menos de un asalto. A poco que el americano conserve un mínimo de lo que le aupó a ser de los mejores de hace un tiempo, debería batirle sin muchas dificultades por su floja técnica sobre la tarima.
La gala se celebra en la mañana de este miércoles si hablamos de horario español, siendo imposible seguirla por ninguna de las plataformas ofertadas en nuestro territorio.