Daniel Pi
@BastionBoxeo
El martes, en el EDION Arena de Osaka (Japón), el campeón mundial WBA del peso minimosca Hiroto Kyoguchi (13-0, 9 KO) (a la izquierda en la imagen) afrontará la segunda defensa de su reinado y la primera obligatoria ante su compatriota, el también japonés, Tetsuya Hisada (34-9-2, 20 KO). La pelea puede resultar especialmente interesante para el público local, ya que el retador es un seis veces campeón de Japón y ha mostrado coraje y voluntad, si bien realmente el titular mundial será claro favorito para imponerse, estando el verdadero aliciente para los aficionados en lo que podría llegar a continuación.
Como meses atrás ya se señaló, el agresivo Kyoguchi planea disputar una unificación a finales de año ante el hábil campeón mundial WBC Ken Shiro, combate que cada vez empieza a tener más forma al haber insistido ambos boxeadores en que es el enfrentamiento que desean realizar para cerrar la temporada en una de las grandes veladas japonesas de fin de año. Dado que el choque decidiría sin lugar a dudas al mejor peso minimosca de la actualidad, catapultándose el vencedor al estrellato en su país, los inconvenientes parecen quedar eclipsados por la ganancia potencial que podrían extraer, de modo que las conversaciones sobre la pugna parecen mucho más que rumores.
Por otro lado, Kyoguchi es consciente de que en el boxeo siempre hay obstáculos tanto previstos como inesperados a la hora de pactar un gran choque, por lo que si no pudiese medirse a Shiro estaría dispuesto a pelear también contra otro púgil de la élite de la división, el venezolano Carlos Cañizales, que se ha ganado un puesto en la cumbre con sus actuaciones ante los japoneses Ryoichi Taguchi, Reiya Konishi y Sho Kimura, anotándose un empate y dos victorias contra estos. Así, siendo además Cañizales un subcampeón WBA, Kyoguchi estaría muy dispuesto a enfrentarse a él para vengar las derrotas de sus compatriotas.
Sea como sea, antes de llegar a esto “Dynamite Boy” Kyoguchi deberá superar a un Hisada que, tras un avance entrecortado, no pierde desde 2015 y que ha establecido una racha de trece triunfos, nueve antes del límite, así que con su fortaleza física y su tesón garantizará rounds trabajados, presión e intercambios. No obstante, Kyoguchi es un púgil técnicamente superior además de más veloz y con recursos mucho más variados, contando con ventajas tan notables en estos aspectos que parece complicado que pueda perder su cinturón si intenta boxear con espacios. Aun así, haciendo honor a su fama de combativo, Kyoguchi asegura que aceptará la guerra que Hisada le planteará, pretendiendo el monarca lograr un triunfo antes del límite imponiendo su astucia y destreza en intensos cruces de golpes.