La boxeadora argelina Imane Khelif alcanzó el olimpo del boxeo en los Juegos Olímpicos de París 2024 al imponerse en la final de la categoría de -66 kg a la china Liu Yang. La púgil africana culminó exitosamente su periplo en la capital francesa, en unos Juegos en los que tuvo que sobreponerse a los constantes ataques que ponían en duda su sexualidad.

Sus hazañas han inspirado a muchas de las personas que hacen apuestas deportivas online en páginas como Casumo. Al conocer esta web, también han encontrado que la web ofrece la mejor experiencia de casino en línea para jugadores. En ella hay más de 600 juegos de casino online como slots, tragaperras, ruleta, ruleta en vivo… Vamos, que puedes encontrar juegos en los que sí podrías ganar, no como en el boxeo donde siempre reinará Khelif.

Khelif, a sus 25 años, ya había sufrido ataques a lo largo de su carrera, pero estos se intensificaron durante París 2024 cuando la argelina derrotó a la italiana Angela Carini en los octavos de final de los Juegos Olímpicos. El combate casi no llega a los 45 segundos porque su rival abandonó la contienda después de recibir un duro impacto en el rostro en el primer asalto. Carini declaró al finalizar el encuentro que nunca le habían pegado tan fuerte. La frase la utilizaron como bandera miles de usuarios de redes sociales que empezaron a poner en duda la sexualidad de Khelif y avivaron una campaña de acometidas.

Porque Khelif es mujer y aunque tiene índices altos de testosterona en algunos controles, no se ha expuesto nunca a ningún tipo de tratamiento de cambio de sexo, como aseguran algunos de sus detractores. Todo viene porque por esos altos niveles se la excluyó de algunas competiciones internacionales en el pasado, como el campeonato mundial de boxeo que organiza la Asociación Internacional de Boxeo. Sin embargo, el Comité Olímpico Internacional ya dejó claro que admitía su participación porque no es una mujer trans.

Desde que era pequeña, Khelif quiso dedicarse al boxeo. Ese deseo le llevó a tener duros enfrentamientos con su padre, de mentalidad tradicional, que consideraba que no era un deporte para niñas. Aunque aún no se tiene toda la información, podría ser que Khelif fuera intersexual, que son las personas que a pesar de que nacen con una combinación de rasgos biológicos, como genitales, hormonas o cromosomas, que no son exclusivamente de hombre o de mujer. En ese caso, puede que sus cromosomas sean XY, los masculinos, en vez de XX, los de mujer.

En los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de París 2024, Khelif se echó a llorar al acabar el combate. Sus lágrimas dejaban salir toda la presión que estaba sufriendo en su camino hacia el oro. No perdió ningún asalto en los cuatro combates que le llevaron a conseguir el título. Al final, su declaración fue: “Soy una mujer como cualquier otra”. Y como tal debería ser tratada.

A mediados de octubre de 2024, un medio francés publicó un artículo en el que difundía que Khelif se había hecho unas pruebas médicas en el hospital Kremlin-Bicetre de París en junio de 2023. Lo habría decidido tras ser expulsada del Mundial. Por lo que contaba el diario, la revisión estuvo coordinada con el hospital Mohamed Lamine Debaghine de Argel, Argelia. En el informe realizado por los facultativos se diagnosticaba a Khelif con una deficiencia de 5-alfa reductasa, un trastorno que solo desarrollan personas que son biológicamente masculinas.

A estas personas se les suele asignar incorrectamente el sexo femenino porque tienen los genitales deformados, de manera que a veces se confunden con los femeninos. El desarrollo desordenado se hace evidente en la pubertad y por lo que señalaba el medio francés, con una resonancia magnética se descubrió que Khelif no tenía útero, sino “testículos internos y micropene parecido a un clítoris agrandado”.

Khelif está preparando acciones legales contra el diario francés, por haber sacado a la luz la posibilidad de que tiene cromosomas masculinos con “documentos no verificados cuyo origen no puede confirmarse”. El Comité Olímpico Internacional también salió en defensa de la boxeadora. Manifestó su tristeza por los abusos que ha recibido Khelif desde que ganó el oro en los Juegos Olímpicos.

El COI lo declaró así: “Todos los atletas que participaron en París 2024 cumplieron con los requisitos de la competición, las reglas de elegibilidad y entrada y las normas aplicables y regulaciones médicas promulgadas por la Unidad de Boxeo París 2024”. La pesadilla continuará en los tribunales.