Daniel Pi
@Bastionboxeo
Con el que algunos han tildado ya, precipitadamente, como el nocaut del año, el canadiense David Lemieux (37-3, 33 KO) se situó ayer en posición de conseguir los mayores combates posibles en la categoría del peso medio. Y es que, después de un emocionante comienzo del encuentro, Lemieux conectó en el tercer round un temible gancho de izquierda que dejó tendido e inmóvil a Curtis Stevens (29-6, 21 KO) durante más de cuatro minutos, hasta que fue sacado en camilla del Turning Stone Resort & Casino de Verona, Estados Unidos. Por suerte, desde el equipo de Stevens se afirma que el púgil se encuentra en buen estado, aunque se le hizo un TAC para asegurarse de que no padecía ninguna lesión de gravedad.
Como aseguraron, el encuentro estuvo lleno de acción, con intensos intercambios en corta desde los primeros minutos. La potencia de pegada del canadiense se hizo notar también muy temprano, conectando un hook diestro que llevó contra las cuerdas a Stevens, si bien éste no se amedrentó y contestó con gran dureza con su gancho de mano adelantada. En el segundo episodio, el estadounidense usó su uno-dos y su contundente jab, diluyendo momentáneamente parte del empuje de Lemieux, aunque, al no tener continuidad, permitió a su rival volver enseguida al ataque con agresivos curvos en los que cargaba todo el peso de su cuerpo.
Finalmente, en el tercer round, habiéndose desarrollado el cruce ligeramente decantado del lado del visitante aunque contendido por la buena replica de Stevens, Lemieux usó su jab de manera repetida hasta que alcanzó a su contrincante con un fuerte gancho de izquierda. Poco después, con Stevens de espaldas al ensogado, Lemieux atacó con un directo que lo dejó muy cerca del local, recurriendo entonces ambos al hook de mano adelantada, siendo el del excampeón mundial el que estalló contra su adversario, que se derrumbó sobre la lona.
En la entrevista posterior al combate, y preguntado por sus próximos objetivos, Lemieux, que sabe que ha relanzado su carrera, señaló: «Está Saunders, está Canelo y, por supuesto, Golovkin, a quien me encantaría derrotar».