El BMO Stadium de Los Ángeles (Estados Unidos) fue el hogar la pasada madrugada de una excelente gala de boxeo con duelos de primer nivel. Fueron varias las promotoras importantes que participaron, tuteladas por Turki Alalshikh en nombre del capital saudí.
Dos enormes cruces vinieron de la mano de los pesos pesados, donde el excampeón mundial unificado Andy Ruiz Jr. (35-2-1, 22 KO) volvió a la acción después de casi dos años para enfrentarse a Jarrell Miller (26-1-2, 22 KO), empatando por decisión mayoritaria de los jueces 114-114, 114-114 y 116-112 para Miller. Fue un envite donde se juntaron la inactividad del californiano y la buena preparación de un Miller que hizo pasar apuros a Ruiz en un par de ocasiones.
Además, Jared Anderson (17-1, 15 KO) dejó de ser la gran promesa americana de los pesados y perdió, tras verse dominado desde el inicio, contra Martin Bakole (21-1, 16 KO). Bakole, especialista en estropear fiestas, se mostró como el sólido púgil al que estamos acostumbrados para noquear a Big Baby, tras un derribo en el inicio, superándole sin paliativos en el quinto parcial. Gran imagen de Bakole que peleó sin complejos y con gran contundencia.
Con anterioridad, David Morrell (10-0, 9 KO) subía al peso semipesado ante el exretador al título mundial Radivoje Kalajdzic (29-2, 21 KO), que perdió con Artur Beterbiev. En liza estaba el título «regular» WBA, que consiguió el cubano dominando al serbio con buen ritmo en el inicio de la pelea principalmente, ya que con el paso de los rounds perdió protagonismo y Kalajdzic fue recortando distancia, aunque no fue suficiente. Al final, los tres jueces le dieron el triunfo a Morrell con puntuaciones de 118-110, 117-111, 117-111.
Y el peso ligero Andy Cruz (4-0, 2 KO) ha seguido dando una gran imagen en el campo profesional, con velocidad y buenos detalles técnicos del campeón olímpico. El cubano venció por KOT en el séptimo asalto al duro mexicano Antonio Morán (30-7-1, 21 KO), que incluso puso en algún aprieto a Cruz.
