Daniel Pi
@BastionBoxeo

Después de la brevísima pausa de la primera semana del año, el boxeo vuelve a ofrecer veladas de relevancia el próximo sábado, siendo una de ellas la que protagonizará todo un excampeón mundial del peso superwélter como el mexicano Jaime Munguía (34-0, 27 KO). Sin embargo, el citado púgil no afrontará este fin de semana una pelea del máximo calibre sino que disputará un encuentro de adaptación y mejora contra el irlandés Gary O’Sullivan (30-3, 21 KO).

El invicto Munguía, que realizó cinco defensas como monarca WBO del peso superwélter, dejó vacante su corona a finales del pasado año tras sopesar si era lo más conveniente o no subir al peso medio, en el que en adelante militará. Dicho movimiento no es visto con optimismo por todos, ya que, si Munguía mostró problemas defensivos, tácticos y de rendimiento ante púgiles mayoritariamente más pequeños y menos fuertes que él, se considera que sus brechas podrían verse agrandadas contra boxeadores de mayores dimensiones y más potencia.

Con todo, otros piensan que la división superwélter le venía demasiado pequeña y que los sobreesfuerzos para dar el peso podrían estar afectando a su boxeo, de modo que consideran que se encontrará más cómodo en la nueva categoría y que perfectamente su rendimiento podría volver a ser el que asombró al público en su irrupción mundialista.

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Sea como sea, antes de volver a disputar importantes peleas, Munguía, de sólo 23 años, realizará un combate pensado para medir cómo se encuentra y cómo reacciona en la nueva categoría y para trabajar las mejoras que su entrenador Érik Morales está intentando desarrollar. Respecto a ello, “El Terrible” ha señalado:

“Jaime es un peleador agresivo por naturaleza. Muchos han criticado su defensa, pero no es un peleador defensivo. Necesita hacer una defensa activa y su mejor defensa es atacar. Y aunque no vamos a atacar irresponsablemente o aceleradamente vamos a hacer que encuentre un equilibrio, que se defienda con movimientos, con inteligencia pero con un mayor ritmo y que controle los tiempos y los espacios de la pelea”.

Si bien cualquier combate puede resultar una gran oportunidad para realizar pruebas y extraer lecturas, el hecho es que difícilmente O’Sullivan debería suponer un test de calado para el mexicano. Es cierto que “Spike” es un boxeador que por su heterodoxia (suele bajar las manos, provocar y apoyarse en fintas) a veces puede resultar incómodo y que logró sorprender a un prospecto estadounidense como Antoine Douglas noqueándolo en un evento de HBO. Sin embargo, siempre deja muchos huecos para recibir golpes de poder, no tiene una gran velocidad de piernas, es más bajo y con menos envergadura y en sus mayores pugnas ha caído siempre ampliamente, siendo noqueado por Lemieux en un round, vencido en siete asaltos por Eubank Jr. y dominado durante doce asaltos por Saunders.

De ese modo parece que Munguía, si logra volver a apoyarse en sus cargas al ataque con completa determinación y sostiene una elevada frecuencia de golpeo, más temprano que tarde debería poder acumular el castigo contra un boxeador que se sobreexpone y que no suele gestionar adecuadamente los combates con constante actividad.

Este enfrentamiento será el estelar de un evento organizado en el Alamodome de San Antonio (Estados Unidos) y que será emitido en España por DAZN desde la 1:00 h de la madrugada del sábado al domingo.