No hay nada más americano que una historia de superación. Eso debió pensar Netflix con la emisión del combate entre Jake Paul Mike Tyson. La victoria del youtuber sobre el excampeón mundial de los pesos pesados ha dado la vuelta al mundo, y las críticas han quedado opacadas por los 58 años de Tyson. Probablemente, la prensa más beligerante con lo ocurrido sobre el ring del AT&T Stadium es la española, que por norma general no presta un seguimiento exhaustivo al boxeo.

Horas después de la pelea, Mike Tyson publicó el siguiente mensaje que ha suscitado reacciones de personalidades de la talla de Elon Musk:
«Esta es una de esas situaciones en las que perdiste pero ganaste. Estoy agradecido por lo de anoche. No me arrepiento de haber subido al ring una última vez. Casi muero en junio. Recibí ocho transfusiones de sangre. Perdí la mitad de mi sangre y 25 libras (11,34 kg) en el hospital y tuve que luchar por recuperar la salud para pelear, así que gané. Que mis hijos me vean enfrentarme y terminar ocho rounds con un boxeador talentoso que tiene la mitad de mi edad frente al estadio de los Dallas Cowboys lleno es una experiencia que ningún hombre tiene derecho a pedir. Gracias».

Cuando se repase la carrera de uno de los boxeadores más populares de la historia como «Iron Mike», aparecerá la anomalía de que realizó un combate casi veinte años después de su retirada. ¿Desde cuándo está Tyson en decadencia? La máquina que atemorizaba a sus rivales besó la lona en Tokio ante «Buster» Douglas en 1990, poco antes de su ingreso en prisión. Desde su primera derrota ante Evander Holyfield ¡en 1996!, quedó claro que Mike Tyson ya no era el que despachó a Michael Spinks en un minuto.

Sus últimas actuaciones ante Danny Williams y Kevin McBride fueron tristes para los seguidores de un campeón legendario. Solo por esto, la Comisión de Texas debería haber sido especialmente escrupulosa a la hora de dar oficialidad y expedir una licencia a un deportista de 58 años con un largo historial de adicciones. Tras la revelación de «Iron Mike» sobre sus problemas de salud, solo el dinero puede explicar que el combate con Paul no haya quedado relegado a una exhibición.