El primer paso para aclarar las cosas ya se ha dado. El campeón mundial WBC del peso superligero Devin Haney, cuyo aspirante oficial es Sandor Martín, ha anunciado oficialmente su próxima cita con el ring.

Y no será con el barcelonés. Haney (31-0, 15 KO) se ha comprometido para luchar el próximo 20 de abril en Las Vegas contra Ryan García (24-1, 20 KO). Será una copromoción entre Matchroom y Golden Boy, empresas que en este momento dirigen las carreras de ambos púgiles, retransmitida en principio mediante PPV en Estados Unidos.

Lo que en principio es una nefasta noticia para Sandor Martín se ha convertido en otro elemento de espera, casi en un ejercicio de fe. El Consejo Mundial de Boxeo se ha hartado de asegurar que Martín es el aspirante oficial y Haney debería defender el cetro contra él; Sandor, por su parte, ha afirmado que su sueño no se compra con dinero y no aceptaría una suma por apartarse, puesto que el futuro es caprichoso.

Solo queda, por ello, aferrarnos a la palabra de Mauricio Sulaimán. Podría aceptar este combate como defensa voluntaria, y después Sandor Martín, sí o sí. ¿Qué creen los aficionados que ocurrirá al final? Pronto, la respuesta.