Una ola de nostalgia invade los pesos pesados. Con Netflix promocionando el combate entre Mike Tyson y Jake Paul, y el regreso de Ike Ibeabuchi, otro ilustre de los años noventa como Oliver McCall volverá al ring en las próximas semanas. McCall prolongó ya su carrera en exceso durante la pasada década, y sus posibilidades deportivas se antojan remotas.
El estadounidense boxeará el 19 de noviembre en Nashville con Stacy Frazier, un púgil que no conoce la victoria desde 2014. McCall colgó los guantes en 2019, con un récord de 59 victorias y 14 derrotas.
A sus 59 años, han pasado tres décadas desde que «El toro atómico» fuese uno de los animadores del peso pesado. El de Chicago fue uno de los compañeros de sparring de Mike Tyson, por lo que firmó con Don King.
McCall se hizo con la corona mundial WBC del peso pesado al derrotar en dos asaltos a Lennox Lewis en Londres. Tras defender el título ante Larry Holmes, McCall perdió ante Frank Bruno.
En 1997 volvió a enfrentarse a Lennox Lewis, en un célebre combate por el extraño abandono de McCall. Aquella «espantada» le apartó de ser contratado por los grandes promotores, y tuvo que conformarse con participar en veladas de menor nivel.