José Manuel Moreno
@josemorenoco
Si hay un boxeador en el mundo acostumbrado a caer y levantarse, ese es el mexicano Orlando «Siri» Salido (42-12-2, 29 KO). Ejemplos: en 2008 perdía un trono vacante del peso pluma ante Orlando Cruz y en 2010, en la revancha, le ganaba al boricua en 2010 la corona de la IBF (posteriormente venció de nuevo en 2013 a Cruz). Después de perder ante Yuriorkis Gamboa, encadenó dos sorprendentes ante el entonces invicto Juanma López, con los pronósticos en contra. El pasado mes de marzo, venció dándole una lección de saber estar al novato Vasyl Lomachenko. Subió de peso obligatoriamente tras fallar en la báscula ante el ucraniano al peso superpluma y en la noche del sábado, en el Auditorio Municipal de Tijuana, hizo el más difícil todavía: superar tres caídas ante el tailandés Terdsak Kokietgym (53-5-1, 33 KO), para vencerle por KOT justo al comienzo del 11º y penúltimo round. «Siri» cayó en los dos primeros asaltos, y por tercera vez en el quinto. Mientras que como prueba de tan magnífico fuego cruzado, el tailandés cayó a la lona en los asaltos, 1, 4, 7 y de forma definitiva en el undécimo, cuando Kokietgym, tras un furibundo ataque de Salido, cayó desplomado y de espaldas a la lona. La gente acabó enloquecida tras ver una de las peleas candidatas a combate del año. ¡Qué batalla!
