José Manuel Moreno
@josemorenoco
En la misma velada del pasado sábado en el Alamodome de San Antonio, Texas (EEUU) tuvieron lugar otros grandes combates. El antepenúltimo de ellos fue la defensa de su título mundial del peso semipesado de la WBA por parte del kazajo Beibut Shumenov (14-1, 9KO) ante el eslovaco Tamas Kovacs. Este no fue rival para Shumenov, que liquidó el combate cómo y cuando quiso. Kovacs visitó la lona en el primer y segundo asalto y cuando cayó de nuevo en los últimos segundos del tercer round, el árbitro puertorriqueño Rafael Ramos paró justamente la pelea. Campeonato decepcionante. Shumenov tiene que ir pensando en medirse a tipos como Hopkins, Stevenson o Kovalev, que darán el diagnóstico de su real valía.
En el combate de semifondo, Keith Thurman (22-0, 20 KO) presentó de nuevo credenciales en la división reina del peso wélter, ganando con solvencia a un fajador de la talla del mexicano Jesús Soto Karass (28-9-3, 18 KO). Buen arranque del mexicano en la pelea, estando a punto de tirar a su contrincante en el segundo round, pero a partir de ahí emergió la figura del púgil de Florida, que se adjudicó un knockdown en el quinto asalto, hasta llegar al definitivo noveno episodio en el que Soto Karass estaba a punto de ser noqueado cuando el árbitro John Schorle paró la pelea. Muy buena pelea, reñida, con intercambios magníficos y un justo y nítido vencedor: Keith Thurman.
Y por último, el mexicano Leo Santa Cruz (26-0, 15KO) retuvo su corona mundial del peso del peso gallo del WBC ante el boricua César Seda Jr. por decisión unánime, después de anotarse una caída del rival en el quinto episodio.