Foreman ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 1968 y fue campeón mundial de los pesos pesados con 24 años en enero de 1973 al vencer a Joe Frazier, al que derribó en seis ocasiones. Retuvo la corona dos veces ante José Román y ante Ken Norton, antes de perderla en 1974 en Kinshasa ante Muhammad Ali.
Tuvo dos victorias espectaculares ante Ron Lyle, una de las peleas de todos los tiempos, y ante Joe Frazier, antes de retirarse en 1977. Regresó en 1987 y se proclamaría campeón mundial en 1994 con 45 años noqueando en histórico combate a Michael Moorer. Defendió con éxito ante el alemán Axel Schultz antes de retirarse definitivamente en 1997 tras una derrota por decisión mayoritaria ante Shannon Briggs, que la mayoría consideró su victoria.
Carismático y querido púgil, Foreman se hizo muy religioso, inspirado por visiones espirituales que afirmó haber experimentado en el vestuario después de la pelea con Jimmy Young, en 1977 antes de su primera retirada. Se convirtió en un gran vendedor durante la segunda etapa de su carrera, siendo su producto más famoso la parrilla George Foreman, que se convirtió en un clásico en las cocinas de todo el mundo. Foreman trabajaba a menudo como comentarista de televisión.
Descansa en paz, querido campeón. Desde ESPABOX, diez toques de campana en su honor.
