Emilio Marquiegui
@EmilMarquiegui
Foto: Matchroom
Dos grandes combates de pesos pesados se han disputado esta noche en el Kingdom Arena de Riad (Arabia Saudí) en la excelente velada llamada «Knockout Chaos», y en el estelar a diez asaltos, el británico Anthony Joshua (28-3, 25 KO) ha destruido literalmente al camerunés Francis Ngannou (0-2), excampeón UFC, que tuvo una buena actuación ante Tyson Fury en su debut en el boxeo profesional.
Ngannou salió bien plantado, tomando el centro del ring y con cambios de guardia para despistar a Joshua, pero el inglés, con una elegancia exquisita conectó una derecha desde su distancia que percutió con gran nitidez en la cabeza de Ngannou, derribándole en el primer asalto. Pero es que en el segundo round, otra vez sendas manos preciosas y precisas de Joshua derribaron al camerunés, la segunda por la cuenta definitiva.
Inteligencia, puntería, estilo y frialdad definen el gran combate de Anthony Joshua, que parece renovado con su nuevo entrenador Ben Davison. Su próximo rival será el vencedor del Tyson Fury ante Oleksandr Usyk del próximo 18 de mayo.
Y en otro excelente combate de pesos pesados, con el título WBO interino en juego, el campeón chino Zhilei Zhang (26-2-1, 21 KO) no pudo vencer al neozelandés Joseph Parker (35-3, 23 KO), a pesar de derribarle en el tercer asalto con una izquierda recta y en el octavo con una derecha en la parte lateral-trasera de la cabeza.
Parker se recuperó de ambos problemas y desde el cuarto asalto fue más activo y superó a Zhang, que había comenzado dominando en los tres primeros rounds. Una pelea estratégica en la que intentaron ambos púgiles no cometer fallos y por poco la victoria por puntos pasó al currículum de Parker, que lleva una buena racha de triunfos y se acerca a disputar el mundial. Los jueces puntuaron 115-111, 114-112, 113-13, decisión mayoritaria para Parker.