Carlos Utrilla
@CJBoxing

Valery Yanchy ha perdido hoy (25/10) su cinturón de campeón de Europa del peso mosca al caer en Liverpool ante Kevin Satchell, por puntos, en un combate cerrado, duro, emocionante y más que bueno. Posiblemente el bielorruso afincado en A Coruña mereció un mejor resultado y esperemos que la buena imagen ofrecida le pueda llevar a conseguir alguna pelea más en Gran Bretaña.

No hubo round de estudio, pues un uno-dos del británico daba paso a las hostilidades. Satchell comenzó mejor, mandando en la media distancia, y en el segundo un choque de cabezas cortaba el ojo izquierdo del coruñés. Quizá espoleado por esto, en el 3º Yanchy comenzó a tomar el pulso al combate, logrando el equilibrio entre el paso atrás y el ataque, ataque que cristalizaba especialmente en potentes golpes de izquierda que entraban de manera nítida. Tampoco rehuyó la corta distancia, donde parecía más cómodo que su rival.

Sin embargo, este boxeo en el infight tiene sus riesgos. Los continuos roces (hombros, cabeza) y algún golpe, reprodujeron la herida del campeón, hemorragia que ya sería profusa hasta el final. Esto le llevó a hacer un boxeo menos agresivo y a preocuparse en exceso por la herida, lo que facilitaría la labor del británico, que volvió a dominar con las manos rectas, en jab o directo.

La situación debía cambiar, y desde el 8º se pudo ver a Yanchy más agresivo, como en los rounds del 3º al 5º. Quizá la rapidez de manos del inglés le permitía mayor volumen de golpes lanzados y acertados, pero los más claros y contundentes fueron del boxeador dirigido por Planas. La dureza del combate se reflejaba también en la hemorragia nasal del aspirante.

“Dos asaltos más con cabeza, Valerio. Pero hay que moverse por los lados”, espetaba a su púgil Chano Planas antes de comenzar el 11º. Quizá le había faltado algo de ese desplazamiento lateral para sortear los golpes rectos del inglés, su principal arma, pero ahora las fuerzas eran escasas por ambos lados. A pesar de ello, los dos últimos rounds fueron intensos, dramáticos. Satchell parecía algo más fresco y como casi durante toda la pelea se mostró más activo, pero fue Yanchy quien logró conmover a su oponente en el final de cada uno de los rounds y de manera ostensible, con una izquierda y una derecha.

Sin embargo, la fatiga era tal que no se decidió a lanzarse a por el británico (ni pudo hacerlo) para intentar acabar por la vía del KO. ¿Debe puntuar esto más que un número superior de manos pero no tan contundentes? Dos de los jueces lo tuvieron muy claro, 117-112 (Sr. Meronen, finlandés) y 116-112 (Sr. Verbeke, belga). El italiano Giuseppe Quartarone, por su parte, tenía la pelea 114-114, resultado que creemos se puede ajustar mejor a lo sucedido sobre el ring.

De todas maneras ha sido una pelea cerrada, difícil de puntuar y donde, como se ha dicho con anterioridad, hubo más actividad por parte del aspirante pero mejores golpes del lado del campeón. Yanchy se queda sin título pero ha salido con la cabeza alta. Y su buena actuación podría hacer que fuera reclamado nuevamente en las islas en esta categoría (para hombres como Iain Butcher) o en supermosca (Jamie Conlan, Khalid Yafai).