El texano Vergil Ortiz (23-0, 21 KO) se impuso por puntos en decisión unánime al uzbeko Israil Madrimov (10-2-1, 7 KO), en uno de los grandes enfrentamientos de la enorme gala de Riad (Arabia Saudí). En juego estaba el título interino WBC del peso superwélter, que Ortiz ponía en juego.
El estadounidense salió desde el principio a llevar la iniciativa y a cortar los espacios, como le pedía insistentemente su preparador, el excampeón mundial Robert García. Madrimov se movía, no quería intercambios crudos con el pegador Ortiz y eso hizo que los asaltos se fueran yendo hacia el rincón del americano, que con una buena guardia evitaba los contragolpes de Madrimov, mientras metía sus manos con cierta claridad.
Madrimov tuvo que arriesgar al ir por detrás en las puntuaciones y se vivieron momentos de buenos intercambios, con el uzbeko jugándose sus posibilidades ante la dureza del potente Ortiz. Al final, se llegó a la decisión de los jueces que fue unánime de manera justa para el campeón, 117-111, la más acertada, y dos muy igualadas con 115-113.
Ortiz va adaptándose a su nuevo rol de buscar también las victorias por puntos al encontrarse con grandes púgiles que no sucumben a las primeras de cambio.
