El púgil japonés Ryosuke Nishida (10-0, 2 KO) realizó ayer una exhibición magistral en la exitosa defensa de su título mundial del peso gallo de la IBF. Nishida se impuso por nocaut técnico en el séptimo asalto al tailandés Anuchai Donsua (16-1, 7 KO) en un combate vibrante celebrado en el Sumiyoshi Sports Center de Osaka, Japón.

A sus 28 años, Nishida consolidó su dominio en la categoría al culminar el combate con un golpe contundente al cuerpo. La acción decisiva se produjo a los 97 segundos del séptimo asalto, cuando un potente gancho de izquierda al torso de Donsua lo envió a la lona. Si bien el tailandés intentó recuperarse, el árbitro Katsuhiko Nakamura decidió detener la pelea para preservar su integridad física.

El campeón japonés, quien obtuvo el cinturón en mayo tras vencer al experimentado Emmanuel Rodríguez (22-3, 11 KO), extendió su récord invicto a 10-0, con 2 nocauts, afianzándose como una de las figuras emergentes más sobresalientes del boxeo japonés. Por su parte, Donsua, quien llegó con un impecable récord de 16-0 y 7 nocauts, ahora tiene un registro de 16-1 tras esta derrota, perdiendo su condición de invicto.

Este triunfo destaca el notable crecimiento del boxeo en Japón, una nación que atraviesa un periodo de gran éxito en el deporte. Con campeones de la talla de Junto Nakatani en el Consejo Mundial de Boxeo (WBC) y la figura legendaria de Naoya Inoue en divisiones superiores, Nishida parece destinado a continuar elevando la bandera japonesa en el ámbito internacional del boxeo.

Donsua, de 28 años, no pudo descifrar la estrategia de Nishida, resultando en su segunda derrota en los últimos tres encuentros. A pesar de su esfuerzo, el púgil tailandés no pudo contrarrestar el ritmo y la potencia del campeón local.

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Ryosuke Nishida ha demostrado poseer el talento necesario para forjar una época destacada, y sus próximos retos serán cruciales para definir su legado en una división de altísima competencia.