Óscar Guzmán
Foto: Javi Hernán
La “Clásica Velada de Colmenar” (29/6/24) no defraudó aunque se vio mermada en asistentes, respecto de ediciones anteriores, la dudosa climatología de los días previos con amenaza de tormentas fue seguramente la razón.
En el combate de fondo, José Ramos Savín (19-0-1, 6 KO) en el peso ligero se impuso por puntos al peruano César Ignacio Paredes (17-8-1, 5 KO), pero este cronista difiere del amplio margen de puntos otorgado por los jueces a Ramos, que indudablemente venció, pero no convenció. Y no por presentarse en mala forma el colmenareño o sin deseos de agradar, simplemente por su empeño de un desenlace antes del límite frente a un ingenioso e instintivo Paredes, que durante los diez asaltos supo leer las intenciones del local y evitar toda suerte de golpes potentes y combinaciones.
Los primeros lances del combate sugerían un momento de intercambio en el que Ramos Savín se acabaría imponiendo por su potencia, llegado el ecuador de la contienda y sin que ninguno de los boxeadores hubiese bajado su nivel de confrontación, se pudo ver a un Ramos desesperado. El inédito zurdo peruano, siempre perseguido, se quitaba las manos con certeras esquivas, desplazamientos y siempre que podía, anotaba con directo de derecha en su cambio de posición. El punto álgido del combate se vivió en el octavo asalto, en el cual diferentes choques de cabezas, mutuos, crisparon a Ramos, el cual fue amonestado por golpear con el codo.
Victoria, pues, justa para el colmenareño, trabajada y que nos demostró que sabe sufrir y administrarse en toda la distancia de diez asaltos, sin altibajos.
El combate de semifondo (8×3) resultó entretenido (semipesado) mientras el foráneo Frank Rojas (25-13, 24 KO) dispuso de gasolina. Rojas planteó su supervivencia, en una clara desventaja de envergadura, en bonitos gestos de desplantes y esquivas con potentes golpes aislados, que frenaban momentáneamente a Adam Trenado (10-5-1, 1 KO) de La Colonia (Marcos Badal & Diana Diñeiro). El talaverano fue un rodillo, de menos a más, que culminó con un potente croché de izquierda, finalizando el sexto asalto, que derribó al venezolano y que aconsejó a su esquina detener el combate, ante la escasa recuperación de Frank Rojas en el minuto de descanso.
Abrió la parte profesional el combate femenino minimosca (8×2) entre Tatiana Pérez (3-0-1, 1 KO) también de La Colonia y la visitante argentina Florencia Villarreal (1-4-3, 0 KO). Combate muy disputado, con clara ventaja de Pérez en los dos primeros y quizá tres últimos asaltos. Potente y claro boxeo de Tatiana, frente a una valiente y constante esgrima de la argentina que los árbitros decretaron como combate nulo. De los tres, un juez decretó nulo, y los otros dos, resultado dispar, uno a favor de Tatiana y otro a favor de Florencia. Seguramente, Tatiana Pérez siempre hizo un poquito más para haber sido la vencedora.
Los cuatro combates amateur fueron entretenidos, la Escuela de Boxeo Ramos Savín siempre presenta nuevos valores, pero es de destacar a Pablo Sánchez que se impuso por RSC en el segundo episodio al visitante maño Sergio Sánchez (Utebo), valiente y de generosa envergadura, que no pudo oponerse al boxeo y pegada de Sánchez. Pablo Sánchez milita ahora en el peso wélter, tras su paso por el medio y superwélter, se ha convertido en corto espacio de tiempo en un boxeador estimable, entregado a su preparación y con deseos de triunfo más allá del campo amateur, atentos a este púgil.
En el resto de combates amateur. Nicolás García (Ramos Savin) VP a Steven Estévez (Nómadas), Jorge Ricardo (RSavín) VP a Tristán Bayarri (Asalto 13) y Roberto Zúñiga (Detroit) VP a Karapeb Abgarian (The Palace).