Darío Pérez
@ringsider2020
Imagen: Golden Boy Boxing

Esta pasada madrugada, el Cosmopolitan de Las Vegas (Estados Unidos) acogió una velada organizada por Golden Boy Promotions y con un claro protagonista.

Como plato principal, teníamos la eliminatoria mundial IBF y WBA de peso ligero entre William Zepeda (30-0, 26 KO) y Maxi Hughes (26-6-2, 5 KO). Los pronósticos se cumplieron: el mexicano, boxeador que se ha ido cociendo a fuego lento con buenos cruces hasta llegar a este punto, demostró que en él se aúnan dos cualidades imprescindibles en el boxeo, ritmo de golpeo elevado y precisión en el mismo. De este modo, demolió a Maxi Hughes en cuatro asaltos, decidiendo la esquina del británico proteger al boxeador de la tunda que recibía y no salir a la llamada del quinto. Gran victoria de un Camarón que cada vez tiene más recursos técnicos y parece llamado a reclamar su lugar entre las estrellas del boxeo actual, pese a que milita en una categoría llena de excelentes campeones.

De acompañante previo, el también ligero Floyd Schofield (17-0, 13 KO), cada vez más realidad que promesa, se midió a Esteuri Suero (13-2, 10 KO). Las constantes irregularidades del mexicano ante el boxeo fluido de Schofield le costaron puntos restados en el segundo y cuarto rounds, produciéndose la inevitable descalificación en el quinto. Además, dos de las joyas de Golden Boy como el peso medio Eric Priest (13-0, 8 KO) o el crucero Tristan Kalkreuth (13-1, 10 KO) sacaron adelante sus pruebas ante rivales de inferior nivel y demostraron estar listos para dar un pasito más.